Dermatitis atópica: un porvenir prometedor

La dermatitis atópica o eczema atópico es un proceso inflamatorio crónico de la piel que afecta a un alto porcentaje de la población, especialmente en la edad pediátrica, aunque en bastantes casos se mantiene o debuta en la edad adulta. Es una enfermedad multifactorial, y en su etiopatogenia están implicadas la predisposición genética, factores ambientales (clima, contaminación, estrés…), la disfunción de la barrera cutánea y una alteración inmunológica que produce una inflamación persistente.

Se caracteriza por prurito intenso que muchas veces produce erosiones por rascado y engrosamiento o liquenificación de la piel,acompañado de  placas eczematosas irregulares de distinto tamaño, distribuidas por toda la superficie corporal y localizándose típicamente en los pliegues. Se asocia con frecuencia a asma y rinitis alérgica.

La dermatitis atópica tiene un buen pronóstico a corto y largo plazo, excepto una mayor susceptibilidad a infecciones cutáneas  (bacterianas, fúngicas o víricas como el herpes simple diseminado). Sin embargo, produce una gran alteración de la calidad de vida de los pacientes: alteraciones del sueño, insomnio, irritabilidad, ansiedad, depresión, además de un mayor número de comorbilidades que la población general. Es muy importante realizar un abordaje psicodermatológico en estos pacientes.

Leer más

..Dr. Gastón Roustan Gullón. Director médico-científico de Dermatología

Más sobre Dermatología en 4Doctors.science

Opinión

Multimedia

Economía

Accede a iSanidad

Síguenos en