Publicado en Diario Médico La mutación, y no la ubicación, es la clave una vez más del tratamiento oncológico. Tres estudios simultáneos de seguridad y eficacia sobre el fármaco larotrectinib, que actúa selectivamente sobre las fusiones de la cinasa del receptor de tropomiosina (TRK), han demostrado que este medicamento alcanza una tasa de respuesta global del 75 por ciento en pacientes pediátricos y adultos (de cuatro meses a 76 años) con diversos tipos de cáncer; todos los tumores tenían en común fusiones de la TRK; de hecho entre estos enfermos se registraban 17 diagnósticos de tumores diferentes. Los hallazgos de esta investigación multicéntrica se publican en The New England Journal of Medicine (NEJM). Sus autores principales son David Hong, de Centro del Cáncer MD Anderson de la Universidad de Texas, y David Hyman, del Memorial Centro del Cáncer Sloan Kettering, en Nueva York.