Un estudio muestra que la ELA además de afectar al cuerpo también lo haría sobre la mente

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..Redacción.
Un nuevo estudio publicado en Neurology, muestra que la esclerosis lateral amiotrófica -ELA- podría afectar no solamente células nerviosas responsables de controlar el movimiento muscular voluntario, como caminar o hablar, sino también a la mente, especialmente en estadios más avanzados de la enfermedad.

Como explica la autora del estudio, Sharon Abrahams, de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido), “desafortunadamente descubrimos que las personas con ELA tienen problemas de pensamiento y problemas de conducta como apatía, cambios en las conductas alimentarias y falta de inhibición, incluso en las primeras etapas de la enfermedad”. “En la última etapa de la enfermedad”, prosigue, “solo un pequeño porcentaje de personas están libres de estos problemas cognitivos y de comportamiento”.

Las personas con ELA y sus cuidadores deben estar informados de que los cambios en las habilidades de pensamiento y comportamiento pueden ser parte de esta enfermedad

Abrahams cree que las personas con ELA deben ser examinadas rutinariamente para detectar estos problemas, por ello afirma que “las personas con ELA y sus cuidadores también deben estar informados de que los cambios en las habilidades de pensamiento y comportamiento pueden ser parte de la ELA para que puedan planificar y observar estos problemas y sepan que están relacionados con la enfermedad en sí”.

En concreto el estudio se realizó a un total de 161 personas con ELA y se compararon con 80 peronas que no tenían esta enfermedad para la que no hay cura.

Todos los participantes realizaron pruebas de habilidades de pensamiento, y se les preguntó tanto a los participantes como a sus cuidadores sobre síntomas de conducta, tales como apatía y pérdida de simpatía o empatía.

La apatía fue el síntoma más común en los pacientes con ELA

Las personas con ELA se dividieron en grupos según la etapa de la enfermedad en la que se encontraban, que está determinada por la cantidad de regiones del cuerpo involucradas en la enfermedad. Las regiones son extremidades superiores; miembros inferiores; área bulbar, que son los músculos que afectan al habla y la deglución; y respirar y comer.

Las personas con ELA (29%) tuvieron puntajes peores que el grupo de control en todas las pruebas de pensamiento excepto la habilidad visual-espacial, que no se sabe que esté afectada por ELA. De las 149 personas con ELA con información sobre síntomas conductuales, el 45% no tuvo problemas, el 22% presentó un síntoma, el 14% registraba dos síntomas y el 20% poseía tres o más síntomas. La apatía fue el síntoma más común, con un 31%.

Los investigadores también encontraron que las personas padecían más problemas con las habilidades de pensamiento y un mayor número de síntomas conductuales en las etapas más avanzadas de la patología. Una limitación del estudio es que se evaluó a los participantes en un momento dado, pero no se les siguió a lo largo del tiempo para ver cómo cambiaron las habilidades de pensamiento y los problemas de comportamiento a medida que la enfermedad avanzaba.

En España se diagnostican alrededor de 900 casos de ELA al año; a nivel mundial hay cerca de medio millón de personas que sufren esta enfermedad

En España se estima que puede afectar a una de cada 400-800 personas a lo largo de su vida. Además, cada año alrededor de 900 nuevos casos son diagnosticados en España y ya hay registrados cerca de 3.000. A nivel mundial hay cerca de medio millón de personas que sufren esta enfermedad y cada hora se diagnostican 17 nuevos casos.

Los investigadores reclaman más recursos y concienciación para poder desarrollar ensayos clínicos para abordar esta enfermedad. Éstos serán algunos de los uno que persigue la Fundación Luzón y que para ello ha organizado junto con la Obra Social “La Caixa” el primer Congreso Internacional de la Comunidad de la ELA (CincELA) que comienza hoy jueves en Madrid y se prolongará hasta mañana.

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