Publicado en Con Salud
A la Consejería de Sanidad que preside Jesús Vázquez Almuiña no le salen las cuentas. El departamento autonómico tuvo que recibir una inyección de 269 millones de euros extra el ejercicio pasado para afrontar los costes del Servicio Gallego de Salud (Sergas), algo que se habría convertido en habitual, según la información publicada en Faro de Vigo. Cada año el Sergas demanda fondos extraordinarios para afrontar el pago de recetas y material médico, por razones derivadas tanto de las necesidades como de un presupuesto deficiente, según ha denunciado en varias ocasiones el Consejo de Cuentas. De los 269 millones de euros que recibió el Sergas, 231,1 millones fueron a parar a recetas, productos farmaceúticos y material sanitario; 35,7 a personal y 1,5 para pagar a clínicas privadas. Pese a los recortes de gasto durante la crisis y la caída de ingresos, en ninguno de los casos, el Gobierno gallego nunca recurrió a los fondos estatales para afrontar pagos de medicamentos a farmacias.