El porcentaje de profesionales “quemados” es un riesgo para todos

..Redacción.
La Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa) ha organizado la 2ª Jornada Precongresual del 21 Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria. Una jornada dedicada a la humanización y sus avances en la que participaron Julio Zarco, presidente de la Fundación Humans, Gabriel Heras La Calle, creador del proyecto Hu-Ci, María Martín Martínez, responsable de formación del proyecto Hurge; Chus Pérez Taboada, vicepresidenta del 21CNH y directora de Procesos de Enfermería de la Estructura de Xestión Integrada de Lugo, Cervo y Monforte, y Pilar Reza, directora de Procesos de Enfermería de la Estructura  Organizativa de Vigo.

Los proyectos de humanización deben contemplar la gestión de lo macro, lo meso y lo micro. Todos los proyectos deben visualizarse desde la homosfera sociosanitaria. El hospital es una membrana osmótica de intercambios continuos y los profesionales sanitarios tenemos que trabajar en los poros”, así explicó Julio Zarco, presidente de la Fundación Humans, una de las claves de la aplicación de la humanización sanitaria durante el coloquio “experiencias en humanización de la asistencia sanitaria”. Zarco destacó la necesidad de crear una cultura de la humanización a través de iniciativas como la creación de ‘grupos hipocráticos’, grupos profesionales formados en diferentes hospitales para desplegar los valores hipocráticos que son, para él, “los valores de la humanización”.

Los proyectos de humanización deben contemplar la gestión de lo macro, lo meso y lo micro

Cuando los profesionales son más felices, son más productivos. Hay que repensar las organizaciones sanitarias y adaptarlas a las personas”, propuso Gabriel Heras La Calle, creador del proyecto Hu-Ci, durante su ponencia. “¿Cómo me van a atender bien, si ellos no están bien? El porcentaje de trabajadores ‘quemados’ nos pone a todos en riesgo. Necesitamos cambiar el modelo de gestión“.  “Dejar de cuidar en serie y cuidar en serio”, afirmó Heras.

Hay que pasar de la contemplación a la activación. No podemos activar a un profesional si no lo formamos, o si no le damos herramientas para aplicar en su día a día”, explicó Juana María Martín Martínez, responsable de formación del proyecto Hurge, centrado en la humanización de las urgencias, emergencias y catástrofes. “Es  necesaria una formación reglada en humanización para las relaciones personales e interpersonales. Debemos poner en marcha sesiones clínicas en diferentes servicios del mismo modo que tenemos, por ejemplo, formación continuada en reanimación cardiopulmonar”, afirmó la especialista.

Cuando los profesionales son más felices, son más productivos. Hay que repensar las organizaciones sanitarias y adaptarlas a las personas

A la hora de recibir reconocimiento por su trabajo, Chus Pérez Taboada, vicepresidenta del 21CNH y directora de Procesos de Enfermería de la Estructura de Xestión Integrada de Lugo, Cervo y Monforte, destacó que para los profesionales lo más importante es la impresión de los pacientes y que, para estos últimos, es sentirse el único paciente.

Pilar Reza, directora de Procesos de Enfermería de la Estructura  Organizativa de Vigo, y moderadora de la sesión, resumió la humanización como el proceso para volver a poner el humanismo en el centro de la atención y gestión sanitaria.

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