La actual fuerza del ICOMEM está en su equipo directivo

Alfonso González
Cuando los colegiados de Madrid eligieron a la actual Junta Directiva del Colegio no podían imaginarse la que se les avecinaba encima como consecuencia de los planes que el Gobierno de la Comunidad estaba diseñando para el nuevo SERMAS. La presencia en la Junta Directiva de médicos que “solo quieren ser médicos” ha hecho que se hayan ido convirtiendo en una referencia para los compañeros en estos momentos complicados. El propio Dr. Guillermo Sierra, ex-presidente de la OMC, ex-candidato a la presidencia del Colegio y contrincante de la Junta actual en las últimas elecciones, tuvo que pedir que constara en acta la buena gestión de la Junta Directiva al frente del Colegio en la crisis sanitaria que está afectando a los médicos de Madrid, hecho que fue aprobado por los compromisarios.

En las informaciones que se van publicando sobre los conflictos como consecuencia de los planes de la Comunidad de Madrid, se reconoce a los diferentes miembros de la Junta Directiva que han promovido, unificado y liderado a colectivos como Afem, Amyts, Plataforma de Jefes de Servicio, sociedades científicas… para crear el Comité Científico Profesional.

¡Se presentaron a las elecciones como “médicos” y siguen actuando como “médicos y no como políticos, tienen los mismos intereses que el resto de los médicos.!

Los objetivos de los miembros de la Junta Directiva siguen siendo los que propusieron en su campaña electoral: “defender al médico” y solo un cambio de objetivos de alguien que forme parte del equipo, como un Caballo de Troya, puede impedirles cumplir sus compromisos:

  • Eliminar los contratos estatutariamente
  • Crear la figura del defensor del médico
  • Acercar el Colegio al colegiado
  • Mostrar transparencia en la gestión
  •  …

Todos aquellos que se han sumado tarde al equipo y quieren distraerles con preocupaciones personales están tratando de deshacer el equipo. La labor de asesoramiento que ha efectuado el Dr. Carlos Amaya, asesor de presidencia del Colegio, no ha tenido el efecto deseado y el rumbo vuelve a ser el original. 

La unidad no consiste en ser amigos, la unidad no consiste en pensar de la misma manera, la unidad no consiste en hacer las mismas actividades, la verdadera unidad es mirar al mismo sitio, tener los mismos objetivos y unir fuerzas para llegar a ellos. Los próximos pasos serán decisivos para mantener el rumbo o ir a la deriva, las Asambleas de Compromisarios para aprobar las cuentas y para eliminar los contratos con nuevos estatutos necesitan el apoyo de todo el equipo. La primera es un trámite legal que deben pasar y demostrar que su gestión es adecuada, y la segunda es un compromiso de todos, que tienen preparados y que cada miembro de la Junta Directiva ha apoyado siempre que ha tenido oportunidades.

El equipo de Gobierno del Colegio es una garantía contra la malversación y los intereses particulares.

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