Isabel González
Luchar contra los avances de la telemedicina es como luchar contra la implantación de los teléfonos móviles. Más que luchar contra ella lo que hay que hacer es situarla en su lugar específico, desarrollarla y aprovechar todas las ventajas que puede dar al sistema de salud, a los profesionales ya los pacientes.
Telemedicina se entiende como “la medicina practicada a distancia” que incluye el diagnóstico, tratamiento y la educación médica. La definición más adecuada sería la de la Organización Mundial de la Salud, que define telemedicina como “el suministro de servicios de atención sanitaria, en los que la distancia constituye un factor crítico, por profesionales que apelan a las tecnologías de la información y de la comunicación con objeto de intercambiar datos para hacer diagnósticos, preconizar tratamientos y prevenir enfermedades y accidentes, así como para la formación permanente de los profesionales de atención de salud y en actividades de investigación y evaluación, con el fin de mejorar la salud de las personas y de las comunidades en que viven”.
* En 1924, aparece en la revista Radio News, un artículo titulado “Doctor por Radio”, donde se explicaba la metodología que se seguía para su funcionamiento.
* En 1959 la Universidad de Nebraska, en su Facultad de Medicina, presenta el primer documento en el que se habla de una telecomunicación visual en el ámbito de la Psiquiatría. Esta experiencia consistió en ver a través de la televisión, y a distancia, el funcionamiento de sesiones de terapia de grupo. Desde entonces las aplicaciones han cambiado de forma sustancial. Por ejemplo, en la década de los 60 se logró transmitir electrocardiogramas desde barcos.
*Ya en 2010, Adrián Carbajal, médico cirujano, se conectó mediante una computadora a un robot que estaba a 895 kilómetros de distancia y el éste comenzó a pasar revista a los pacientes. Entraba y salía de las habitaciones, hacía preguntas y saludaba a los enfermos, acompañado de otros médicos y enfermeras.
Las aplicaciones más habituales de la telemedicina son la telediagnosis, la teleconsulta, el monitoreo remoto, las reuniones médicas por videoconferencia o el almacenamiento digital de datos o fichas médicas así como las clases a distancia desde centros médicos.
Ventajas del sistema para pacientes y profesionales
La aparición de internet es uno de los hitos más importantes en el desarrollo de esta metodología. Las barreras físicas y situacionales de los pacientes hacía necesario la creación de algún tipo de elemento para poder facilitar el acceso a este tipo de pacientes y al seguimiento de los mismos.
Principales ventajas para pacientes
- Aumento de la eficiencia por la optimización de los recursos asistenciales. Es probablemente la ventaja más importante porque permite el acceso a distintos especialistas sin necesidad de desplazamientos por parte de los pacientes
- Coordinación de la información entre los distintos niveles asistenciales. Implica una reducción de trámites administrativos y por tanto un menor tiempo de resolución de problemas, lo que supone un aumento de confianza en el sistema de salud y un aumento de la eficiencia en la gestión de procesos.
- Mejora de la gestión de la demanda al coordinar las citas entre profesional y paciente de forma más eficiente, reduciendo las listas de espera.
- Disminución de las estancias de los pacientes en los hospitales y los desplazamientos de los pacientes o profesionales que beneficia el atender a pacientes alejados de los centros aprovechando mejor los recursos al disminuir las estancias y los tiempos de éstas.
Principales ventajas para profesionales
- Todas las ventajas descritas con anterioridad, mejoran su calidad de atención al paciente así como el seguimiento que con este tipo de herramientas puede ser más continuado y diario al poder el paciente suministrar vía internet las fases de su patología. Como ejemplo en el marco del XXIII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Diabetes (SED) donde se presentó la plataforma de telemedicina diabeTIC que permite la automatización en el envío de valores de glucosa y estar en contacto con el médico vía telemática con un aparato desde su móvil, tableta u ordenador. Esto involucra más al paciente en su enfermedad, incrementa la productividad del servicio sanitario y controla costes. Permite crear un sistema de alertas y de seguimiento que supone un avance importante en esta enfermedad.
- Mejora en la comunicación de datos entre profesionales del mismo y de diferente ámbito, así como respecto a la investigación y análisis de patologías. Los más beneficiados de este intercambio han sido aquellas especialidades que trabajan de forma fundamental con la imagen, como la radiología o la dermatología, pero también la psiquiatría ha desarrollado herramientas para el intercambio de trabajos en vídeo.
- Para el paciente fundamentalmente es una herramienta importante que aumenta la accesibilidad y comunicación entre él y el médico así como acceso a la propia información de su patología. No menos importante es la ventaja de no tener que desplazarse tanto al centro médico.
Principales desventajas para pacientes
- La no presencia física plantea dudas y temores, ¿es fiable un diagnóstico sin tener contacto directo?
- La confidencialidad de esta información y su limitación está también en el aire, ¿hasta dónde es beneficioso la transmisión de datos al paciente?, ¿todos dentro del ámbito de la medicina podrían acceder a datos privados del paciente sin ser necesariamente paciente propio?
- Debe estar regida por los principios éticos fundamentales. Una mala forma de utilización sería para la comunicación de malas noticias o elevado contenido emocional. Se tendrá que dejar muy claro al paciente como funciona este tipo de método y su conformidad con el mismo así como intentar que esta comunicación sea los más clara posible.
Principales desventajas para profesionales
- Este sistema sería un complemento para las labores médicas pero también, ¿quitaría puestos de trabajo? Una cuestión que en estos tiempos sería bastante importante plantear.
- ¿El profesional está tan bien preparado para atender a un paciente físicamente como a distancia?, ¿qué datos pueden ser percibidos directamente que no puedan serlo “a distancia”?
La telemedicina plantea varias cuestiones determinantes, ¿en qué especialidades es beneficioso o coherente el uso de estos elementos?, ¿qué deberá ser analizado por los diferentes ámbitos de la profesión, así como costes y ubicación de los mismos?
