Los médicos claman para que López Arribas se vaya y permita el funcionamiento del Colegio y la JD

Los médicos de Madrid están hartos del escándalo continuo de la presidenta del Colegio de Médicos de Madrid. La forma de actuar de Sonia López Arribas, todavía presidenta, tiene a los médicos indignados, que ya lo van comentando por los centros de trabajo.

Hay que reconocerle a López Arribas y su entorno el éxito en darle al Colegio un protagonismo que no había tenido antes. Sus continuas salidas de tono que se han recogido en los medios de comunicación ha hecho que el interés y la indignación haya sido creciente, no solo en los propios medios, sino entre los propios colegiados, los médicos que pagan las cuotas. A la vez que se comenta la decadente problemática profesional aumenta la indignación contra ella.

La llegada de López Arribas al Colegio ha estado “tocada” por los escándalos, siempre muy ligados a la reafirmación de su autoridad y las cuestiones económicas. Desde el principio se vio como su objetivo era imponer su autoridad y unos propósitos lejos de los que le llevaron a ser la más votada en las elecciones.

Antonio Mora
López Arribas impuso la contratación de un Director General, amigo personal, engañando al respecto de su origen, formación y experiencia, con un sueldo de escándalo y una acumulación de poderes desproporcionados. Con la cobertura de la presidenta y con su aprobación Antonio Mora provocó despidos de personal, gastos caprichosos, amenazas a miembros de la Junta Directiva… La presidenta amenazó con marcharse si Antonio Mora se iba, tuvo que ser “degradado”, se le redujo el sueldo, se le cambiaron las funciones… pero siempre actuó como “parapeto” interno de la presidenta, que no ha criticado ni una vez que haya denunciado a todos los médicos. La asamblea aprobó sus gastos en restaurantes de lujo porque la presidenta no quiso que fueran detallados.

Modificación estatutaria
El total de la Junta directiva empezó a trabajar para que no hubiera contratos en el ICOMEM, tal como habían prometido, pero la presidenta siempre ha luchado por lo contrario. La asamblea de modificación de los estatutos fue otro escándalo mayúsculo porque quedó en evidencia que mintió a la colegiación ocultando informes jurídicos para que saliera su opción. Ella está a favor de que haya contratos en el Colegio con las posibles comisiones y corruptelas que generan. Justo lo contrario que la Junta Directiva.

Gastos personales
Uno de las claves de la presencia de López Arribas en el Colegio parece ser los gastos personales. Desde la Junta directiva se ha tenido que proceder a retirarle la tarjeta de crédito corporativa porque tiene “cientos de pagos” realizados en restaurantes de lujo en Madrid con la única justificación de “realizados con personas importantes”. Ni la Junta Directiva lo puede permitir ni los médicos tampoco.

Opuesta a la honestidad
La connivencia de la presidenta con la oposición es total. Hay evidencias, reconocidas fehacientemente por ellos mismos de que trabajan conjuntamente para la destitución de la Junta Directiva. La presencia del marido de López Arribas, Capitán de Corbeta de la Marina Española, como protagonista de la estrategia para desbancar al resto de la Junta Directiva es la última prueba de su incapacidad para liderar el mayor colegio de médicos de España.

Intentado involucrar a la OMC
La propia necesidad de López Arribas de defender inútilmente su posición ha hecho que traslade la posibilidad de “mantenerse” en el cargo al Consejo General de Colegios de Médicos. Como la Junta Directiva del Colegio ya no la apoya por sus intereses particulares alejados de los intereses colegiados, ahora quiere involucrar a otro estamento, y cuando se le cierren las puertas del CGCOM lo intentará con el Ministerio o la corte de Estrasburgo.
..Alfonso González

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