La especialidad médica de Rehabilitación y Medicina Física se postula dentro del panorama sanitario como la especialidad que garantiza el tratamiento más eficaz para mejorar la discapacidad, y por tanto la calidad de vida, de aquellas personas afectadas por daño cerebral adquirido que han visto alteradas sus funciones motores y sensitivas. El daño cerebral adquirido es la afectación de las estructuras encefálicas en personas que, habiendo nacido sin ningún tipo de daño cerebral, padecen alteraciones en su cerebro como consecuencia de un tumor, ictus o traumatismo craneoencefálico, cuya principal causa, a su vez, son los accidentes de tráfico, aunque también los laborales y deportivos, caídas o armas de fuego. Las secuelas de un daño cerebral son múltiples y, dependiendo de la gravedad y de la zona afectada, se manifiestan en trastornos de la movilidad, problemas de comunicación, déficits cognitivos y alternaciones emocionales y de la conducta. Esta combinación de secuelas imposibilita la realización de alguna actividad básica de la vida diaria en un 60% de los casos y la discapacidad severa o total en un 45%. (Médicos y Pacientes)