Si una imagen vale más que mil palabras, la sonrisa sobre estas líneas más aún: se trata de la primera fotografía que se publica de la auxiliar Teresa Romero, la primera contagiada de ébola fuera de África, tras vencer al virus. Pero están las palabras: en esta entrevista exclusiva, una semana después de superar el trance, Romero niega haber cometido errores al contagiarse, rechaza haberse tocado con un guante y asegura que avisó en el centro de salud, cinco días antes de su hospitalización, de que había tratado a los misioneros del ébola. Pero, sobre todo, sonríe. (El Mundo)