Un trabajo del Centro para la Prevención y el Control de Enfermedades (CDC) de Atlanta, en Estados Unidos, ha revelado que las quemaduras en la piel, los desmayos y las lesiones oculares son las principales lesiones detectadas en urgencias por intentar un bronceado artificial a través de una cabina de rayos ultravioleta (UVA). Hasta ahora se sabía poco sobre los efectos adversos más inmediatos, según han reconocido los autores en la revista JAMA Internal Medicine. Para estudiarlos, los autores analizaron las lesiones recopiladas en los servicios de urgencias hospitalarias de Estados Unidos entre 2003 y 2012, a partir de una muestra nacional en la que se identificaron un total de 405 lesiones. Al extrapolar los datos, calculan que cada año se pueden producir unas 3.234 lesiones relacionadas con el uso de estos aparatos de bronceado, y los afectados solían ser en mayor medida mujeres (82,2 por ciento), de raza blanca no hispana (77,8 por ciento) y de entre 18 a 24 años (35,5 por ciento). (El Médico Interactivo)