El Servicio Andaluz de Salud indemniza con 31.634 euros a los familiares de un bebé fallecido por una cardiopatía no diagnosticada a tiempo

El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha autorizado abonar una indemnización de 31.634 euros a los padres de un bebé al reconocer que “la prestación sanitaria dispensada no fue correcta ni adecuada y que no fue diagnosticada a tiempo una cardiopatía congénita que padecía”.

En una nota, la asociación ‘El Defensor del Paciente’ ha informado de la resolución del SAS que estima parcialmente la reclamación patrimonial de los padres de F.S.A. y se les reconoce el derecho a ser indemnizados en 31.634 euros, “cantidad que éstos estiman insuficiente y recurrirán ante el juzgado de lo contencioso administrativo de Almería”.

‘El Defensor del Paciente’ ha explicado que los hechos se remontan a primeros de mayo de 2012, cuando S.H.P. dio a luz en el Hospital Comarcal de Baza (Granada), centro en el que se emitió un informe neonatal en el que se decía que el niño estaba en buen estado. Sin embargo, cuatro días más tarde los padres del recién nacido acudieron al centro ambulatorio de Macael (Almería) para que le realizaran la prueba del talón, momento en el que el pediatra se dio cuenta de que el pequeño no respiraba con normalidad y podría sufrir una traqueomalacia (es una debilidad y flacidez de las paredes de la tráquea que se desarrolla después del nacimiento).

El médico solicitó el traslado del niño al servicio de urgencias del Hospital de Baza y allí un segundo pediatra, el mismo que había actuado como neonatólogo durante el nacimiento, diagnosticó efectivamente que sufría una traqueomalacia “sin realizarle ninguna prueba” y le dio el alta “sin prescribir tratamiento alguno”.

Cuatro días después, debido a la mala respiración y la perfusión que presentaba el bebé, los padres acudieron de nuevo al servicio de urgencias del Hospital de Baza. En este caso se diagnosticó un shock cardiogénico e insuficiencia cardiaca descompensada con posible cardiopatía congénita.

Finalmente, el 14 de mayo de 2012 el bebé tuvo que ser trasladado al Hospital Materno-Infantil Carlos Haya de Málaga con diagnóstico de cardiopatía compleja de la que fue intervenido sin éxito y por la que falleció a final de mes.

La cardiopatía debió diagnosticarse durante el embarazo
‘El Defensor del Paciente’ afirma que “la cardiopatía del niño debió haber sido diagnosticada durante el embarazo, y que el no serlo impidió programar la finalización de la gestación así como los cuidados hasta la corrección quirúrgica de la cardiopatía”.

La resolución del SAS reconoce en este caso “un retraso diagnóstico de la cardiopatía congénita de cuatro días, sin que sea posible determinar la incidencia concreta que dicho retraso supuso en el fallecimiento”.

Además, el SAS admite que “la prestación sanitaria dispensada no fue correcta ni adecuada a la lex artis y protocolos asistenciales, no habiéndose puesto a disposición del paciente todos los medios médicos, técnicos y científicos existentes, apreciándose nexo causal entre la asistencia médica y el desafortunado fallecimiento”.

Sin embargo, el SAS dice que “dada la supervivencia estadística de este tipo de cardiopatías, considera proporcionado indemnizar a los padres en un 30% por pérdida de oportunidad terapéutica”, punto en el que no coinciden los progenitores del bebé, que recurrirán por vía judicial esta decisión.
..Emilio Ramirez

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