Según cuenta El Porvenir de Castilla La Mancha, el único licitador al reinicio de las obras del nuevo Hospital de Toledo, privatizado por el Gobierno de Cospedal y al que se le ha adjudicado acabar el centro, está encontrando dificultades para que los bancos les financie su construcción. Primero, ante la incertidumbre electoral que hay en Castilla-La Mancha, ya que puede haber cambio de Gobierno en mayo y, segundo, por una demanda de derechos de autor que presentará la antigua Dirección Facultativa de estas obras contra los autores del nuevo proyecto, con muchos visos de ganar y que puede suponer que las entidades bancarias pierdan su inversión. (Acta Sanitaria)