El Pleno del Senado aprobó ayer, con 148 votos a favor, la reforma del Código Penal tras un largo debate que se prolongó durante más de siete horas, tras lo cual será remitido de nuevo al Congreso de los Diputados para su examen definitivo. El texto ha sido mejorado sustancialmente en el Senado en cuyo trámite se han introducido más de un centenar de enmiendas de distintos grupos parlamentarios y transaccionales, entre ellas se incluye la presentada por dicho Grupo, a propuesta del senador Jesús Aguirre, relativa a que las agresiones contra funcionarios docentes o sanitarios sean consideradas actos de atentado. Se trata, en concreto de modificar el artículo 550 del todavía actual Código Penal, estableciéndose, además, que “los atentados serán castigados con penas de prisión de uno a cuatro años y multa de tres a seis meses, si el atentado fuera contra una actividad, y de prisión de seis meses a tres años, en los demás casos”. (Médicos y Pacientes)