El Colegio de Médicos de Murcia ha conseguido la inspección y cierre de una clínica, ubicada en Lorca, que incumplía la normativa sanitaria actual. La intervención de la organización colegial ha sido crucial para el cese de la actividad de este centro que publicitaba terapias que son competencia exclusiva de profesionales médicos, tal y como dispone el artículo 6.2. de la Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de Ordenación de las Profesiones Sanitarias, y que eran practicadas por un equipo de dos personas que no constan como médicos en la Organización Médica Colegial, con lo que se estaría produciendo un posible caso de intrusismo profesional. Además, al tratarse de un establecimiento sanitario, debería estar dado de alta en el Registro de Recursos Sanitarios Regionales, un hecho que el Colegio de Médicos no pudo constatar tras consultar el Registro y que los Servicios de Inspección de la Consejería de Sanidad corroboraron posteriormente. (Médicos y Pacientes)