El programa Horizonte 2020 de la Unión Europea se ha asociado a la financiación de la innovación para el lanzamiento de nuevos productos que den soluciones a problemas de la sociedad, pero también surge como una alternativa para costear los estudios de evaluación de nuevos medicamentos y tecnologías. “Existen fondos que pueden estar disponibles para este tipo de investigación”, subrayó David Epstein, doctor y profesor contratado de la Universidad de Granada. Epstein explicó durante la celebración de las 35 jornadas de la Asociación de Economía de la Salud, que tuvo lugar la semana pasada en Granada, que las agencias de evaluación de tecnología sanitaria tienen la necesidad de realizar estudios adicionales en casos de “poca evidencia”. Entre la posibilidad de aprobar o rechazar la innovación surge un tercer mecanismo: las aprobaciones condicionadas, “hasta que otros estudios aporten más datos”, afirmó. (Gaceta Médica)