Los tumores pueden aprovechar la glucosa y otros nutrientes, como el acetato, para resistir a las terapias dirigidas a moléculas celulares específicas, según informa un equipo de científicos del Instituto Ludwig para la Investigación del Cáncer que estudian el glioblastoma, un cáncer cerebral mortal. Los resultados, publicados en ‘Proceedings of the National Academy of Sciences’, demuestran que los nutrientes pueden afectar fuertemente a las moléculas de señalización que conducen a tumores. “Este estudio muestra que los factores metabólicos y nutricionales podrían ser muy importantes en el desarrollo y el tratamiento del cáncer”, dice el autor principal del trabajo, Paul Mischel, profesor de Patología en la Universidad de California San Diego y miembro del Instituto Ludwig en San Diego, Estados Unidos. La investigación también pone de relieve una manera en la que los tumores pueden evadir medicamentos como erlotinib y gefitinib, inhibidores de una forma mutante de la molécula celular EGFR (receptor del factor de crecimiento epidérmico) que impulsa el crecimiento de muchos glioblastomas y otros tipos de tumores. (El Médico Interactivo)