Los acusados por la denuncia de supuestas vejaciones y coacciones realizada contra ellos por la presidenta del Colegio de Médicos de Madrid (Icomem), Sonia López Arribas, se vieron sorprendidos cuando, a punto de entrar en el juicio, el abogado de la presidenta propuso el archivo del caso, propuesta que ratificada ante el juez. Según nuestras informaciones, en uno de esos actos de arrebato que suele protagonizar la presidenta del Icomem, consideró como vejaciones que un escrito, que había solicitado con cajas destempladas durante una reunión de la Junta Directiva, se cayó al suelo cuando se le iba a entregar, lo que motivó una primera denuncia contra la vicepresidenta del colegio por supuestas vejaciones; y, posteriormente, ante las respuestas de ésta y de algunos de los presentes en relación con la actitud despótica de López Arribas con los trabajadores, decidió ampliar la denuncia, en este caso por coacciones, contra el resto de los miembros de la Junta Directiva presentes en la reunión. La marcha atrás de López Arribas en este caso parece responder a la indicación de su abogado para que no acumule más denuncias en falso, pues podrían volverse contra ella. (Acta Sanitaria)