El barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), correspondiente al mes de septiembre de 2015, el primero tras las elecciones autonómicas y municipales, ha preguntado a los ciudadanos su opinión sobre el trabajo que ha llevado a cabo el Gobierno de su comunidad en materia de sanidad durante los últimos cuatro años. En general, las notas obtenidas no son nada positivas. Sólo en La Rioja y Cantabria el porcentaje de quienes creen que la actuación del Ejecutivo ha sido buena supera al de quienes opinan que ha sido regular, mala o muy mala. En concreto, en La Rioja, el 33,1 por ciento ha señalado que la actuación ha sido ‘buena’ y el 26,9 por ciento cree que ha sido ‘regular’. Esta es la herencia que ha dejado el popular José Ignacio Nieto, al frente de la sanidad riojana. En el caso de Cantabria, el 26 por ciento ha puntuado el trabajo del Gobierno como ‘bueno’. De los datos se puede desprender que los cántabros avalan la política de la exconsejera María José Sáenz de Buruaga en aspectos como la finalización del Hospital de Valdecilla, que ha eclipsado sus cuatro años al frente de la sanidad regional. (Redacción Médica)