El Parlamento Europeo (PE) se ha unido a la condena internacional por el bombardeo del hospital de Kunduz, considerándolo un crimen de guerra grave, y ha expresado sus condolencias a las familias de las personas asesinadas. Asimismo, se ha solidarizado con los heridos y con el personal de Médicos sin Fronteras, los cuales son todas víctimas de esta violación flagrante de la Convención de Ginebra. Por todo ello, el PE pide que los responsables sean identificados y castigados. Como recuerda el PE, durante la noche del 3 de octubre de 2015, el centro de traumatología dirigido por Médicos sin Fronteras en Kunduz, Afganistán, fue bombardeada varias veces por las fuerzas de la OTAN, a raíz de una decisión adoptada por los EE.UU, dejando a muchos pacientes y miembros del personal médico y paramédico muertos o heridos y causando graves daños estructurales al edificio, cuya ubicación era bien conocida por las fuerzas que participan en los combates en la zona. (Médicos y Pacientes)