Publicado en Diario Médico La epidemia provocada por el virus de Zika en Sudamérica, América Central y el Caribe se ha asociado con un aparente incremento de los casos de microcefalia en los hijos de mujeres afectadas por el patógeno durante el embarazo. Sin embargo, todavía no está claro este riesgo. Un estudio que se publicó ayer en The New England Journal of Medicine aporta pruebas que apuntan a la existencia de una relación causa-efecto. Tatjana Avsic Zupanc, de la Universidad de Liubliana (Eslovenia), y su equipo describen el caso de una embarazada residente en Brasil que presentó fiebre y erupción cutánea hacia el final del primer trimestre. Una ecografía realizada a las 29 semanas de gestación reveló microcefalia, con calcificaciones en el cerebro y la placenta. La embarazada solicitó la interrupción del embarazo y se practicó una autopsia fetal en la que se apreció microcefalia, agiria casi completa, hidrocefalia y calcificaciones distróficas multifocales en la sustancia blanca cortical y subcortical, con desplazamiento cortical asociado e inflamación focal leve.