Publicado en Acta Sanitaria El consejero de Sanidad del gobierno de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, ha tenido que recordar que el Sistema Nacional de Salud (SNS) es uno e igual para todos, por más que algunos políticos, como sucediera cuando Dolores Cospedal (PP) gobernaba en esta comunidad, se pretendiera hacer negocio con la asistencia a los de la región de al lado, como se puso de manifiesto en el acuerdo firmado entre Madrid y Castilla-La Mancha, gobernadas ambas en aquel momento por el PP, para que los hospitales de Aranjuez y de Parla (los dos nuevos de esa creación infame de Esperanza Aguirre) pudieran tener pacientes de Toledo que les cubrieran gastos. Ahora se está viendo cuál era la pretensión, pues ahora desde Madrid se dice que Castilla-La Mancha debe cantidades por la asistencia a ciudadanos de esta región. Y ha sido Fernández Sanz, que desde el principio viene denunciando tal acuerdo del gobierno de Cospedal, el que ha tenido que recordar que, en 2015, en las urgencias de los hospitales públicos de Castilla La Mancha, se atendieron a más de 15.000 ciudadanos de la Comunidad de Madrid, a los que no se les piensa cobrar nada, porque no se entiende que deban nada.