La inminente campaña electoral que se nos avecina de nuevo empieza con un claro hándicap frente a la última “sufrida” a finales de 2015: todos los partidos se han hecho muchos “selfies” durante estos meses y ya les conocemos a todos, pero lo más difícil de digerir es que ninguno está interesado realmente en el sistema sanitario ni en sus profesionales, solo en aprovecharse de ella para lograr votos. Si no han mostrado interés durante la fase de negociaciones, ¿vamos a creer lo que nos van a contar ahora?
En el acuerdo de legislatura entre PSOE y Ciudadanos, no hay ningún plan especial para los profesionales sanitarios ante la situación de los médicos, solo una mención a la Tarjeta Sanitaria, el refuerzo de la gestión pública del sistema, el papel del Consejo Interterritorial, una cartera común de servicios igual para toda la ciudadanía, desarrollar y potenciar nuevos roles para los profesionales de enfermería en el sistema público de salud de manera que puedan asumir mayores competencias clínicas y otras generalidades que no tienen ningún efecto directo sobre la tarea diaria.
Como respuesta, Podemos presentó un documento con el título 20 propuestas para desbloquear la situación política y posibilitar un Gobierno de cambio sí tiene un punto específico sobre sanidad y copagos farmacéuticos, aunque se centra exclusivamente en los recortes y la sanidad universal.
El Partido Popular no se ha movido de lo que propuso para el 20 de Diciembre o no han trascendido nuevas propuestas, así que parece que con un Plan para reducir las listas de espera, otro para la Ordenación de los Recursos Humanos del Sector Sanitario, el reconocimiento del “valor sanitario” de las asociaciones de pacientes, y poco más es suficiente.
Los partidos no parecen tener demasiado interés en responder a los principales problemas que tiene todos los médicos: saturación de servicios, contratos precarios y pérdida de poder adquisitivo. Si tuviesen interés ya habrían dicho algo.
..Dr. López Ortega
