Publicado en Redacción Médica La devolución de la paga extraordinaria de 2012 y otros incrementos salariales a los empleados de la sanidad pública en 2015 costaron casi tanto como los nuevos tratamientos de hepatitis al Estado y las comunidades autónomas. Así lo revelan las’ Cuentas Trimestrales de las Administraciones Públicas’, que acaba de publicar el Ministerio de Hacienda, y que indican que la partida destinada a la remuneración de asalariados en la sanidad creció un 3,8 por ciento en 2015, hasta los 989 millones de euros. Muy cerca de los 1.094 millones que finalmente costaron los nuevos tratamientos de la hepatitis C. De hecho, reiteran y ahondan en que “el gasto asociado a los tratamientos de hepatitis C”, de carácter extraordinario, se encuentra entre las tres operaciones que han conducido a que el déficit sea equivalente al 5,08 por ciento del producto interior bruto (PIB). Por culpa de esta inversión, el capítulo de consumo intermedio ha crecido un 4,1 por cierto, cuando sin ella lo hubiera hecho en solo un 0,1 por ciento. Aunque también hay que matizar que esto se hubiera debido también a un motivo sanitario. Concretamente, a “la subida de los tipos de IVA en productos sanitarios, tales como equipos médicos, aparatos, productos sanitarios y demás instrumental de uso médico y hospitalario”, aunque no se concretan los ingresos de las administraciones públicas por la puesta en marcha de esta medica.