El consumo desmedido de alcohol podría fomentar el riesgo de suicidio entre los hombres cuando además la situación económica por la que pasa el país es de recesión, y es que así se desprende de una investigación reciente de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) en Estados Unidos.
Estudios anteriores encontraron una asociación entre un mayor riesgo de suicidio en los estadounidenses y las recesiones económicas, sin embargo, estos investigadores de la UCLA decidieron examinar qué rol desempeñaba el alcohol en ese vínculo.
Como explica el autor del estudio que, publicó la revista Alcoholism: Clinical and Experimental Research, Mark Kaplan, profesor de bienestar social de la UCLA, la nota predominante es que las recesiones económicas se vinculen con un declive general en el consumo de alcohol.
Los investigadores analizaron datos de 16 estados del país para comparar el consumo de alcohol entre las víctimas de suicidio y la población general en 2005-2007, durante la recesión de 2008-2009, y una vez más en 2010-2011.
“Algo sorprendente es que hay evidencias de que los individuos intoxicados en el momento del fallecimiento no necesariamente tenían antecedentes de abuso del alcohol antes del suicidio”, explica Kaplan. Este hecho denota que, muchas personas cayeron en el consumo desmedido de alcohol inducidos por un agente externo, en este caso, la recesión económica del país.
El porcentaje de víctimas de suicidio que estaban ebrias en el momento en que fallecieron aumentó durante la recesión. Entre los hombres, el consumo desmedido de alcohol entre las víctimas de suicidio aumentó más que en la población general. Sin embargo, entre las mujeres que murieron por suicidio no ocurrió lo mismo, indican los investigadores. En lugar de ello, la tasa de consumo desmedido de alcohol de las mujeres fue idéntica a la de la población general.
Los hallazgos muestran el “aumento en la importancia” del consumo de alcohol como factor de riesgo del suicidio entre los hombres durante las recesiones económicas, según los investigadores, pero el estudio no probó que el consumo desmedido provocara que los hombres murieran por suicidio.
Las políticas de control del alcohol, como unos precios e impuestos más altos, podrían reducir el riesgo de suicidios relacionados con el alcohol durante una recesión, junto con programas para ayudar a las personas que hayan perdido su trabajo, planteó Kaplan.
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