Publicado en Redacción Médica Un Vicente Calderón a punto de estallar. Así se verían, por ejemplo, las gradas rojiblancas del estadio del Atlético de Madrid si se llenaran con los estudiantes que, en la última convocatoria de la selectividad, quedaron en las listas de espera en su anhelo por conquistar una de las 6.877 plazas ofertadas en los grados de Medicina en España. En concreto, más de 47.000 estudiantes han visto truncada su posibilidad de acceder a la titulación sanitaria, al menos durante este año. En la Universidad de Málaga, por ejemplo, la lista de espera para el grado de Medicina es la más amplia de toda la institución. En la última convocatoria, se han ofertado 170 plazas que se han agotado con gran rapidez, dejando a 2.243 candidatos a la espera de que una de los cupos quedase vacante. En este sentido, la oferta solo ha cubierto el siete por ciento de la demanda registrada en esta facultad. Una tendencia aún menor en otras universidades. Ese es el caso de la Universidad de Islas Baleares. La nueva facultad de Medicina abrió su primera convocatoria con un total de 60 plazas (como aprobó la Conferencia General de Política Universitaria), pero la lista de espera registrada alcanzó un total de 1.011 aspirantes. En este sentido, las vacantes ofertadas equivalen al 5,6 por ciento del total de estudiantes presentados para convertirse en médicos.