La administración de ocho hospitales del este de la ciudad siria de Alepo, de los que uno fue destruido por los bombardeos, han solicitado la evacuación de los enfermos y heridos de la urbe, y el fin de los ataques aéreos.
Y es que en el día de ayer, los centros sanitarios afirmaron en un comunicado que desde hace un mes los barrios orientales de la población, rodeados por el ejército y controlados por los opositores, están afrontando “una agresión sin precedentes por parte de la fuerza aérea rusa y la siria”.
Asimismo, asegura que ambas aviaciones han empleado todo tipo de armamento indiscriminado contra la mitad este de la localidad, como proyectiles antibúnker y barriles de explosivos, y que al menos en una ocasión, se ha documentado el uso de gas cloro en el barrio de Al Zabdie. Al respecto, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos ya denunció el pasado martes 6 de septiembre que las fuerzas gubernamentales sirias lanzaron un ataque con gas en el barrio de Al Sukari, provocando síntomas de asfixia a unas 60 personas, entre ellas menores.
Los hospitales lamentan que en este tiempo al menos 300 personas han muerto y más de 1.000 han resultado heridas por los ataques, mientras que la mayoría de centros sanitarios han sufrido bombardeos, sobre todo, el M10, uno de los principales en la zona este de la ciudad de Alepo, y que el pasado sábado 10 de octubre quedó fuera de servicio tras ser atacado con “bombas de racimo”. Ya, sólo quedan cinco hospitales en funcionamiento en los distritos asediados de la localidad.
Debido a estas condiciones, los hospitales han pedido que se evacué a los pacientes fuera de la ciudad para que puedan recibir tratamiento en Turquía y se muestran dispuestos a aceptar cualquier iniciativa y cumplir los requisitos que demande la ONU “para salvar a los heridos”. No obstante, “nuestra petición principal es que paren los bombardeos indiscriminados y contra los hospitales, y que se proporcionen los mecanismos útiles para proteger a los civiles”, agrega el texto.
Asimismo, exigieron la creación de un corredor humanitario seguro para la salida de los enfermos y la entrada de ayuda, como medicinas, comida y leche para bebés.
Menos de 30 médicos para atender a más de 250.000 personas
Desde el pasado 22 de septiembre, Alepo es blanco de una ofensiva de las fuerzas armadas sirias y de la aviación de Rusia. Hace una semana, el ejército sirio anunció que rebajaba su operación militar con una reducción de los bombardeos y disparos de artillería, pero los ataques aéreos se han intensificado desde el inicio de esta semana y han causado decenas de heridos.
Menos de 30 médicos, y es que ese es el número de facultativos que siguen vivos en el este de la ciudad de Alepo. Entre los médicos que sobreviven solamente hay dos pediatras, cuatro obstetras y escaso personal de enfermería para una población en la que hay más de 250.000 personas, incluyendo 85.000 niños, tal y como denuncia el pediatra sirio Abd Arrahman, representante de la Asociación Médica Siria.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó a principio de mes de que al menos 3.686 personas murieron, entre ellas 1.228 civiles, por el conflicto armado en Siria durante el pasado mes de septiembre, frente a las 4.475 que fallecieron en agosto, según el recuento mensual que publica la organización. Entre las víctimas civiles, 276 eran menores de edad y 158 mujeres, indicó el Observatorio.
..Emilio Ramirez
