Publicado en Diario Médico Ni homicidio imprudente ni ningún atenuante posible en la condena judicial dictada a los padres de una niña que nació en casa, por expreso deseo de su madre, y que falleció quince horas después por falta de asistencia sanitaria. La Audiencia Provincial de Las Palmas de Gran Canaria ha condenado a los padres del bebé a quince años de prisión cada uno por un delito de homicidio, con el agravante de alevosía. La dureza de la condena se entiende porque durante la instrucción del caso quedó demostrado que los padres fueron viendo cómo el bebé iba perdiendo vitalidad, sin solicitar ninguna atención médica. Los hechos constitutivos del delito se centran en el día en que la condenada rompió aguas en su casa, donde tenía todo preparado para dar a luz, como era su expreso deseo, a pesar de tratarse de un parto de riesgo.