Publicado en ABC La Sanidad pública aragonesa tuvo el año pasado un agujero presupuestario de 49,9 millones de euros. Es el dinero que se gastó en compras y servicios sin que tuviera soporte presupuestario, es decir, sin dinero habilitado para poder hacer frente a los pagos. El Servicio Aragonés de Salud agotó su presupuesto antes de que acabara el año, así que las facturas por las compras y servicios para las que no había dinero se guardaron en los cajones y pasaron a engrosar la cuenta 409 de la contabilidad pública del Gobierno aragonés. Es el epígrafe al que van a pagar los gastos realizados pese a no haber partida presupuestaria disponible. Según los datos oficiales del Gobierno aragonés, el año pasado la cuenta 409 del Servicio Aragonés de Salud ascendió a 49,9 millones de euros. Pese a lo abultado de la cifra, fue mucho menor que el saldo con el que cerró 2015, cuando el agujero llegó a alcanzar los 203 millones de euros.