Publicado en urbantecno La Inteligencia Artificial es sin lugar a dudas el invento más fascinante y poderoso del siglo XXI. Su forma de procesar al más puro estilo red neuronal y su proceso de entrenamiento nos recuerda bastante a nuestro cerebro y cómo aprendemos. Por eso, qué mejor que la IA para la detección de una enfermedad tan atroz como el Alzheimer. Igual puede servir para adivinar los ingredientes exactos de una receta que para poder entender todo lo que tu perro te quiere decir. Se trata de una tecnología sin límites, o mejor dicho, seremos los humanos los que la usemos con prudencia para evitar que todo su potencial se emplee para el mal, porque ya hemos visto que incluso es capaz de detectar la orientación sexual de una persona con una simple instantánea.