Dr. Jesús Caramés: Los profesionales sanitarios van a tener que adaptarse a gestionar recursos de la mejor manera posible

La gestión clínica va a constituir un núcleo importante de los cambios que afecten al Sistema de Salud en el futuro y, sin lugar a duda, en este terreno el profesional sanitario es una figura clave. El Dr. Carlos Zarco, director de la Fundación Espriu y director Médico en el Hospital Universitario de La Moncloa en Madrid; y el Dr. Jesús Caramés, especialista en Cirugía Pediátrica, experto en gestión sanitaria y codirector del Curso de Experto de Dirección de Unidades de Gestión Clínica de 4Doctors, en colaboración con la Universidad Francisco de Vitoria han sido protagonistas del coloquio sobre la Gestión clínica y su impacto en la atención sanitaria, moderado por la Dra. Teresa Diez Laplaza, Directora Médica de 4Doctors.

¿A qué retos se enfrenta el sector sanitario?
Una de las cuestiones principales en este debate gira en torno a los retos que enfrenta el sector sanitario y en qué medida el conocimiento de los clínicos y su involucración en el ámbito de la gestión clínica puede tener una repercusión en la atención sanitaria que se oferta al ciudadano. Y es que “retos hay muchos; los retos a los que se enfrenta la sanidad son: la cronificación de enfermedades, el envejecimiento, los sistemas diagnósticos por venir“, afirma el Dr. Zarco y sostiene que “vamos hacia una medicina muy personalizada“. Añade  que “en mi carrera nadie me explicó nada de gestión clínica y la capacidad de gasto que tengo como profesional es tremenda. Uno tiene que ser consciente de los costes que implica y que hay muchas decisiones clínicas que cuando uno habla, por ejemplo, de pruebas blancas, a lo mejor hay que hacer una mejor selección de la prescripción para ver si es coste-eficiente y tomar medidas al respecto“. El Dr. Zarco lo considera un aspecto primordial sin el cual, incluso “se va a poner en juego la supervivencia de buena parte del Sistema de Salud o de la Sanidad Pública y Privada, tal y como se entiende hoy“.

Dr. Zarco: “En mi carrera nadie me explicó nada de gestión clínica y la capacidad de gasto que tengo como profesional es tremenda”

El Dr. Caramés coincide con lo señalado y explica el escenario al que estamos asistiendo, saliendo de la crisis económica. “Al margen del marco económico y del futuro incierto por incremento de costes, hay dos cuestiones que a mí me preocupan: por un lado, el papel del ciudadano paciente en el sistema está cambiando, ahora tiene mucha información, nuevos sistemas de información que hacen que el paciente tenga mucha información“, argumenta el Dr. Caramés y sostiene que, además, al mismo tiempo, el paciente “se va a corresponsabilizar del propio cuidado de la salud y, en la medida en que el estado de bienestar también aumenta, el ciudadano se hace más consumidor de producto sanitario“. Este es un factor que, en su opinión, va a influir mucho en la relación existente ahora mismo entre profesional y paciente.

Por otro lado, el Dr. Caramés corrobora que “el profesional también tiene sus peculiaridades y el papel que juega en la organización es peculiar. Por un lado, se siente más ligado a la profesión que a la empresa que le contrata. Por otra parte, el profesional es quien tiene la capacidad de gasto y, al mismo tiempo, está muy desmotivado en la mayoría de los hospitales, salvo excepciones“. El Dr. Caramés achaca este hecho a su escasa participación en la toma de decisiones. El sector afronta, por tanto, un escenario complejo desde el punto de vista macroeconómico que, en ocasiones, llega al extremo de que el profesional que va a tomar las decisiones está poco motivado, no se encuentra cómodo y no se siente respaldado por la propia organización que le ha contratado.

Dr. Caramés: “Estamos en un momento de gran incertidumbre. Los profesionales, junto con los ciudadanos, van a tener que cambiar la forma de ver el sistema, y los gestores van a tener que adaptarse e incorporar a los profesionales en la mejor gestión de estos recursos tan escasos”

Otro factor que se ha señalado durante el debate es que el proceso de atención va más allá de las puertas del hospital y que, dado el envejecimiento poblacional y el aumento de la cronicidad, la Atención Primaria y la atención socio-sanitaria van a jugar un papel cada vez más importante. “Estamos en un momento de gran incertidumbre. Los profesionales, junto con los ciudadanos, van a tener que cambiar la forma de ver el sistema, y los gestores van a tener que adaptarse e incorporar a los profesionales en la mejor gestión de estos recursos tan escasos“, explica el Dr. Caramés.

El impacto de la gestión clínica como instrumento de microgestión en las organizaciones sanitarias, públicas y privadas
Otro asunto de enorme trascendencia en el marco del debate gira en torno al posible impacto de la gestión clínica como instrumento de micro gestión en las organizaciones sanitarias, tanto públicas como privadas. En opinión del Dr. Zarco, independientemente de que estemos en el 8% del PIB en gasto sanitario, público y privado, “la tendencia es que sigue creciendo. Y si nosotros tenemos menos porcentaje del PIB en producto sanitario, en gasto sanitario, quizá es por lo que cuesta lo que se paga a los profesionales, no porque lo demás sea menos costoso que en el resto del mundo“, argumenta y añade, refiriéndose a la gestión clínica, que “dicho eso, yo creo que es imprescindible, tanto en la Sanidad pública como en la privada, aunque trabajemos de manera diferente desde el punto de vista financiero“. A modo de ejemplo, el Dr. alude a que él dispone de un presupuesto como el que tiene un hospital público, pero igualmente ha de ser rentable para ser sostenible. “Yo no tengo accionistas porque todos los hospitales del Grupo Asisa son de una cooperativa de médicos que es Lavinia; no vamos a dar dividendos pero sí que tenemos que ser sostenibles y ganar dinero“, enfatiza y explica que dentro de las directrices y líneas estratégicas que se posean, hay que incluir dentro de éstas el trabajo diario y poner a gente a trabajar con conocimiento. “Hoy por hoy, hay sistemas de información lo suficientemente potentes en Sanidad como para dar, sin que nadie cocine ninguna información, información clínica y económica al profesional, y eso le puede ayudar mucho cuando tiene conocimiento“, añade el Dr. Zarco. “Tú no puedes pedir a un clínico que se involucre, se comprometa, si no tiene la información. Es primordial“.

Dr. Zarco. “Tú no puedes pedir a un clínico que se involucre, se comprometa, si no tiene la información. Es primordial

El Dr. Caramés distingue tres claros aspectos cuando habla de gestión clínica: “Primero, que el paciente debe ser el centro de la atención. En segundo lugar, prestar una atención de calidad. Y, tercero, hay que incorporar a los profesionales en la gestión“. Argumenta que, pese a parecer sencillo, no es fácil implementarlo y añade que, por duro que parezca, “podríamos casi afirmar que, hasta ahora, en el Sistema Sanitario, en el caso del Público, que es el que más conozco en profundidad, el paciente ha contado muy poco“. Según su criterio, este hecho se remonta a los años 70, cuando los profesionales se agrupaban en torno a cátedras y trabajaban en torno a la cátedra de Medicina y de Cirugía, “porque pensábamos que era la mejor organización para trabajar“, añade el Dr. Caramés. A continuación, próximos a los 80, surgieron las especialidades médicas “porque se pensaba que los cardiólogos trabajaban mejor juntos, porque podían discutir los casos, mejorar el proceso de atención. Los digestólogos, los cirujanos cardíacos, los internistas…“.  Y el paciente ingresado, según argumenta, estaba cambiándose de planta y de cama, en función de la evolución de la problemática de su patología. “Esto parece que no es muy razonable“, añade el Dr. Caramés. “Lo razonable sería que el paciente se fuera a una cama y la organización pusiera todos los recursos a disposición del paciente“. Para el Dr. Caramés, esto es la gestión clínica: “hay que agrupar a los profesionales que tratan procesos, que esos profesionales hagan guías y guías clínicas, que las consensúen, que trabajen en equipo“, y pone por ejemplo la unidad de mama, muy avanzada en este proceso, ya que “en la unidad de mama, que es el cáncer femenino más frecuente en la mujer, el cirujano, el ginecólogo, el patólogo, el radiólogo, el médico de medicina nuclear, el cirujano plástico, el oncólogo, trabajan de forma consensuada, conjunta, y la mujer no tiene que moverse de la consulta, porque prácticamente ya casi no ingresa, y todos los profesionales la atienden de forma coordinada“. Este es el cambio que, según explica el Dr. Caramés, hoy debe producirse en el Sistema. “Hay que trabajar de una forma coordinada, de forma transversal y pensando en el paciente, que es el que tiene ese proceso. Esto se facilita si existe un buen sistema de formación“, añade.

Dr. Caramés: “Hay que agrupar a los profesionales que tratan procesos, que esos profesionales hagan guías y guías clínicas, que las consensúen, que trabajen en equipo

El Dr. Zarco pone por ejemplo el trabajo que se lleva a cabo en su hospital: “Mi hospital vive de esa realidad. Nosotros tenemos claro que el centro del sistema es el paciente. Y, de hecho, lo tenemos tan claro que según entra por la puerta hay una unidad de atención al paciente que trata de facilitarle la vida“, sostiene, y añade que en su experiencia, nunca le han gustado los “enfermos de romería: que voy a buscar a no sé quién, que vengo a buscar a no sé quién. El paciente es el centro del Sistema y los profesionales nos organizamos para darle la asistencia“. De este modo, continúa el Dr. Zarco, la asistencia que se le va a proporcionar al paciente será de mucha mayor calidad, “mucho más humana, que está de moda la humanización de la asistencia sanitaria pero, sobre todo, mucho más eficiente, o eficaz“. Con los sistemas de información, esa labor es más sencilla, y el Dr. Zarco pone un claro ejemplo: “al hospital tú entras con una aplicación de móvil y, si tienes una cita en las consultas externas, te geolocaliza y te dice: ¿quiere usted darle a llegada?, le das a “sí” y te genera el ticket. Así sabes dónde tienes que ir. Es decir, tenemos muchas cosas que pueden facilitar el buen gobierno o la buena gestión clínica, sin duda“.

Dr. Caramés: Cuando acabamos la carrera no sabemos lo que es un programa de calidad, no tenemos información sobre cómo está organizado ni el sistema sanitario ni prácticamente cómo está organizado el hospital

¿Qué conocimientos y competencias tiene que desarrollar el profesional para convertirse en un buen gestor e implicarse activamente en la gestión clínica?
Los conocimientos y competencias que ha de tener un profesional para ser un buen gestor y llevar a cabo una adecuada implicación en la gestión clínica, constituyen un tema de máxima relevancia y así se ha puesto de manifiesto durante el coloquio. Para el Dr. Zarco, “siempre está el paradigma de que un buen clínico no tiene por qué ser un buen gestor, pero lo que está claro es que un mal clínico será un mal gestor, porque nos dedicamos a una actividad muy peculiar, en la que tienes que conocer muy claramente sus características“. Y alude a que, desde el inicio de la formación de base de los médicos, no se sabe hacer ver la importancia de la gestión. “Venimos de la medicina basada en la eminencia a la medicina basada en la evidencia y, seguramente, estamos en la medicina basada en las bases de datos. Yo creo que vamos hacia una medicina mucho más personalizada, en la que las soluciones van a ser a medida, y los médicos van a tener mucha más capacidad y mucha más responsabilidad en las decisiones que van a tomar. Y esto lo que conlleva es que tienen que tener una formación adecuada“, enfatiza el Dr. Zarco. “No me sirve que “la ciencia todo lo tapa”, yo en esto soy muy crítico, hay costes que son absolutamente prescindibles si se hace una buena gestión“, explica y añade que “la información es uno de los pilares fundamentales. Igual que se comparan resultados clínicos, se pueden tener que comparar resultados a nivel de coste económico detrás de las patologías”.

Dr. Zarco: “Siempre está el paradigma de que un buen clínico no tiene por qué ser un buen gestor, pero lo que está claro es que un mal clínico será un mal gestor, porque nos dedicamos a una actividad muy peculiar, en la que tienes que conocer muy claramente sus características

Para el Dr. Caramés: “Los gestores y los clínicos hablan el mismo idioma“, pero “no nos han formado en gestión. Cuando acabamos la carrera y cuando acabamos el MIR, en la formación de residente no sabemos lo que es un programa de calidad, no tenemos información sobre cómo está organizado ni el sistema sanitario ni prácticamente cómo está organizado el hospital“. Y alude a una importante laguna en cuanto al desconocimiento del Sistema, donde sería bueno que gestores y clínicos llegaran a un entendimiento. “Sería bueno, y los gestores estaríamos mucho más cómodos, que los profesionales entendieran nuestro lenguaje y entendieran por qué queremos tomar algunas decisiones que tienen que ver con el consumo de recursos. Ese consumo de recursos que no es para ahorrar, sino que lo que pretendemos es ser más eficientes para dedicar recursos a otras cuestiones que no podemos atender“, añade el Dr. Caramés. “De lo que se trata es de hacer más eficiente la gestión y conseguir que en el resultado del proceso de atención podamos incrementar nuestra capacidad y ser más eficientes“, y explica que “yo creo que los gestores están obligados a destinar el 10% del presupuesto de RR.HH. a formación. Sería la mejor inversión que podrían hacer de futuro”.

Dr. Caramés: “Sería bueno, y los gestores estaríamos mucho más cómodos, que los profesionales entendieran nuestro lenguaje y entendieran por qué queremos tomar algunas decisiones que tienen que ver con el consumo de recursos”

La importancia de un curso de experto en Dirección de Unidades de Gestión Clínica de 4Doctors en colaboración con la UFV
Como colofón del debate, los expertos han debatido sobre la importancia y las bondades de los cursos de formación en Dirección de Unidades de Gestión Clínica para los profesionales sanitarios que deseen convertirse en buenos gestores. No obstante, el Dr. Caramés explica que: “yo creo que no debemos intentar convertir a los médicos en gestores. Los médicos tienen que ser líderes clínicos, buenos profesionales. Si son líderes clínicos van a tener reconocimiento del conjunto de los compañeros que tienen en el servicio. Si, además, a ese líder clínico le hacemos un complemento de formación en gestión, yo creo que es lo mejor que podemos hacer“. En defintiva, tal y como sostiene, se trata de “anticiparse al cambio, saber y facilitar el trabajo en equipo, motivar e incentivar a los profesionales. Es algo que también se puede aprender y que en el curso de 4Doctors está contemplado“.

Dr. Caramés: “Los médicos tienen que ser líderes clínicos, buenos profesionales. Si son líderes clínicos van a tener reconocimiento del conjunto de los compañeros que tienen en el servicio. Si, además, a ese líder clínico le hacemos un complemento de formación en gestión, yo creo que es lo mejor que podemos hacer”

En esta materia, el Dr. Zarco aporta nuevamente la experiencia de su hospital: “Nosotros hace 20 años empezamos en los sistemas de calidad, y esa cultura ha ido trascendiendo. Hoy por hoy, somos un hospital que tiene más de 650 puntos en la EFQM, y muchos de los profesionales han hecho tantas auto evaluaciones, que ya no les es ajeno de lo que estamos hablando. Nosotros estamos quizá un paso más allá“. Añade que “la dirección de RR.HH., de personal, es gestión de personas y gestión del talento, que es de lo que se trata. Creo que un curso como el que estáis planteando es muy interesante para cualquiera, quiero decir para cualquier médico, se vaya a dedicar a ser gestor o no se vaya a dedicar a ser gestor“, concluye.
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