Impulsar la formación y la autonomía personal, claves para acabar con la tasa de exclusión laboral de personas con Asperger

En la charla coloquio ‘Empleo y vida independiente’, celebrada en Torre ILUNION con motivo de la conmemoración del Día Internacional de las Personas con Asperger, que se celebra cada 18 de febrero, se puso de manifiesto que el impulso de la autonomía personal y la apuesta para mejorar la formación en las diferentes etapas educativas son dos elementos fundamentales para acabar con la elevada tasa de exclusión del mercado laboral que sufren las personas con Trastorno del Espectro del Autismo (TEA), incluyendo las personas con síndrome de Asperger, que ronda el 90%.

La jornada que, contó con la participación del secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Mario Garcés, estuvo organizada por la Confederación Autismo España, la Confederación Asperger España y la Confederación Española de Autismo (FESPAU).

El 2018 tiene que ser el año del Plan de Acción de la Estrategia Española en Trastornos del Espectro del Autismo

Definitivamente este tiene que ser el año del Plan de Acción de la Estrategia Española en Trastornos del Espectro del Autismo”, y es que así inauguraba Garcés el encuentro quien, se ha comprometido a abordarlo con las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial del 1 de marzo.

El plan, tal y como explicó “ha contado con el concurso de las diferentes formaciones políticas”, por lo que muestra su convencimiento de que “vamos a recabar el apoyo de todas las autonomías”.

En mayo la OMS revisará un código que supondrá un cambio cualitativo en la atención del Asperger: dejará de considerarse una enfermedad mental

Este plan implica la actuación de muchas administraciones territoriales, además de la Administración del Estado, y necesitamos contar con su apoyo y su consideración para poder ejecutar el conjunto de las medidas”, añadió. Además, destacó que este año va a ser “muy importante” porque la OMS revisará en mayo un código que supondrá un “cambio cualitativo” en la atención del Asperger, y es que dejará de considerarse una enfermedad mental.

Posteriormente, tuvo lugar la mesa ‘Formación y empleo’, en la que Sabina Lobato, directora de Formación, Empleo, Proyectos y Convenios de Fundación ONCE, indicó que uno de los retos está en la educación para “mejorar la inserción laboral de las personas con TEA, puesto que la prioridad es el empleo”. Al respecto, afirmó que “desde Fundación ONCE contamos con el apoyo del Fondo Social Europeo desde hace unos años para poder mejorar oportunidades laborales, prestando especial atención a las nuevas tecnologías”.

Un 90% de personas con Trastorno del Espectro Autista no tiene acceso al mercado laboral

Por otra parte,  Ana Gil, directora del Proyecto ‘contrataTEA’, lamentó que “un 90% de personas con Trastorno del Espectro Autista no tiene acceso al mercado laboral y el 10% restante accede a puestos de baja cualificación”. Por eso, hizo hincapié en que el trabajo es un “derecho fundamental” y que desde ‘contrataTea’ están poniendo todo el estuerzo posible con el objetivo de ayudar a las empresas a incorporar este talento y a eliminar las barreras y estigmas con las que se encuentra este colectivo cuando quieren encontrar un puesto de trabajo.

En el marco de la jornada, también se ha celebró la mesa ‘Familia y vida independiente’. En ella, Gonzalo Berzosa, director de la Escuela de Bienestar de la Fundación MAPFRE, explicó que la familia y la vida independiente caminan juntos. A su juicio, “a mayor sobreprotección, menor vida independiente”, y es que “la vida autónoma del Asperger no depende solo de sus capacidades personales o de las habilidades que ha aprendido, sino del apoyo familiar y social, y de tener una actitud abierta”.

“Lo que queremos es ser autónomos”, contando con los apoyos, pero “sin pecar de sobreprotección y exceso de paternalismo”

En relación a los pisos tutelados, Luis Arenas, psicólogo sanitario de Autismo Sevilla y director del Proyecto de Vida Independiente de la Asociación, indicó que “nosotros pensamos en muchas ocasiones en la atención, y nos encontramos con que los apoyos, a veces, deben ir más dirigidos a las familias”. Destacó que “en Andalucía hay viviendas supervisadas para personas con trastorno mental o viviendas tuteladas para personas con discapacidad intelectual, pero no existen pisos para personas con Trastorno del Espectro Autista”.

La jornada contó con el testimonio de personas con síndrome de Asperger que, expusieron la realidad de este colectivo. Cristina Paredero reivindicó que “lo que queremos es ser autónomos”, contando con los apoyos, pero “sin pecar de sobreprotección y exceso de paternalismo”. Además, hizo referencia a terminar con los prejuicios que tiene esta enfermedad, porque según explicó, ante situaciones como la firma de un contrato de alquiler y poder optar a una vivienda, a veces “nos hemos visto obligados a fingir ser normales para poder conseguirlo”.

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