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La Organización Mundial de la Salud declaró los malos tratos a las personas mayores como problema de salud. Con motivo del Día Internacional de las Personas Mayores, SEMERGEN Solidaria recuerda cuales son los derechos más vulnerados de los ancianos. “Apostamos por un modelo de sociedad más cohesionada, solidaria y diversa, que proteja a quienes no pueden estar en la corriente principal de la vida social y económica porque son pobres, dependientes, sufren aislamiento o no tienen redes de socialización y convivencia afectiva”, afirma la Dra. Mª Carmen Martínez Altarriba, secretaria de SEMERGEN Solidaria.
Miles de personas mayores sufren cada día malos tratos físicos, psíquicos, sexuales, económicos, etc. pero solo denuncia el 10% de los casos. Una de las formas de maltrato más comunes es la sujeción física. De hecho, España es el país con el porcentaje más alto en el uso de sujeciones entre los países de su entorno. Mientras que en países como Dinamarca esta cifra apenas alcanza el 2%; en España supera el 39%. No obstante, el principal problema es la falta de sensibilidad social sobre este asunto. El uso de sujeciones contradice los objetivos de los cuidados prolongados, que son conseguir la máxima independencia física y mental y la mejor calidad de vida posible. Otra forma frecuente de maltrato es la omisión de cuidados.
Miles de personas mayores sufren cada día malos tratos físicos, psíquicos, sexuales, económicos, etc. pero solo denuncia el 10% de los casos
Pero sin duda, lo que más sufren los mayores es la soledad no deseada. Por ello, SEMERGEN Solidaria ha puesto en marcha un proyecto de lucha contra la soledad no deseada en colaboración con la ONG Seniors en Red. El objetivo de este proyecto es aplicar los conocimientos médicos para reducir el sufrimiento de las personas en situaciones de vulnerabilidad. Un aspecto fundamental del mismo es la prevención, para la cual, el papel del profesional de atención primaria es imprescindible, puesto que tienen acceso al domicilio del paciente. Es más, la soledad y el aislamiento social son los principales condicionantes de salud identificados en atención primaria. Sin embargo, no se registra en la historia clínica ni aparece en los objetivos incentivados.
En España, el 36,8% de los mayores de 65 viven en hogares unipersonales. Además, el 56% de los hombres y el 72% de las mujeres reconocen sentir algún tipo de soledad. Está demostrado que la soledad influye en el bienestar y la calidad de vida. Aumenta el riesgo de sedentarismo, tabaquismo, consumo de alcohol y de una alimentación inadecuada. En definitiva, se relaciona con una mayor morbimortalidad y con la aparición de la demencia.
SEMERGEN Solidaria ha puesto en marcha un proyecto de lucha contra la soledad no deseada
Desde SEMERGEN recuerdan que los médicos tienen la obligación de implicarse en esta lucha. Y deben hacerlo “abriendo los ojos ante situaciones y formas de trato, consideradas como normales, pero que son maltrato”. La sociedad científica recuerda que ante el maltrato, existen recursos legales a los que acudir.
