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Las asociaciones piden al ministro de Sanidad que muestre su sensibilidad con las compañías y archive definitivamente el expediente de desfinanciación. El Ministerio de Sanidad pretende desfinanciar los fármacos Sysadoas, aprobados por la Aemps por su eficacia y seguridad. La medida supondría un ataque a la Sanidad Universal española además de comprometer los derechos de grupos vulnerables y afectaría a los derechos de la mujer, pues la artrosis es una enfermedad claramente de género. Las asociasiones son:
- La fundación internacional de pacientes con artrosis (OAFI)
- Aecosar
- AGP
- Conartritis
- Foro Español de Pacientes
- LRG
La desfinanciación de los Sysadoas supone además un impacto negativo dado que aumentaría el consumo de analgésicos, Aines, opiáceos con el aumento de efectos adversos, hospitalizaciones, bajas laborales y posiblemente más prótesis. Todo ello, conllevaría a un grave empeoramiento de la calidad de vida de los pacientes con artrosis. Y asimismo, proporciona un aumento directo del gasto sanitario, todo lo contrario de lo que la medida pretende.
La artrosis es una enfermedad que supone un gasto sanitario de 4738 millones de € de coste medio anual para el sistema sanitario español. En España, ya hay 7 millones de personas con artrosis y se espera que siga creciendo debido al aumento de la esperanza de vida. Más del 50% de la población mayor de 65 años presenta algún tipo de artrosis, siendo una de las articulaciones más afectada la rodilla. La artrosis tiene prevalencia en la mujer, siendo una enfermedad de género.
Los fármacos como el sulfato de condroitina y la combinación con la glucosamina, son eficaces y seguros
Además, la artrosis constituye la tercera causa de incapacidad transitoria (15% del total) y la primera causa de incapacidad permanente (50% del total). En 2016 se pusieron más de cien mil prótesis de cadera y rodilla.
La recién pandemia del Covid-19 pareció que iba a aparcar y poner fin al proyecto de recortar la prestación farmacéutica a mayores y mujeres con artrosis. Sin embargo, una vez levantado el estado de alarma, parece que todo está listo para
privar de los Sysadoa’s a millones de pacientes con artrosis.
Si sucede en realidad, estaría conduciendo a quienes padecen esta enfermedad a consumir analgésicos, antiinflamatorios o morfina para intentar aliviarsu sufrimiento. Este consumo no remediaría su patología, sino que tendría efectos secundarios en la salud. Si no se rectifica la voluntad de suprimir la financiación de estos medicamentos, muchas mujeres y muchos mayores tendrán un mayor deterioro por las limitaciones asociadas a la artrosis. También influyen las comorbilidades que comúnmente se asocian con ella, como las enfermedades cardiovasculares, hepáticas, renales, gastrointestinales, entre otras. Estos pacientes se encontrarían sin alternativa terapéutica.
A las razones de seguridad, hay que añadir el empobrecimiento que la crisis del Covid-19. Desde las compañías aseguran que “estamos completamente seguros de que el recorte planteado acabaría generando un gran incremento del gasto sanitario por el empeoramiento de los pacientes”. “Las asociaciones de
pacientes tenemos programas especiales para reducir este gasto, es por eso por lo que pedimos que se nos escuche”, sentencian.
En la misma línea, quieren recordar que fármacos como el sulfato de condroitina y la combinación con la glucosamina, son eficaces y seguros, por lo que están aprobados por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios. Así lo confirma el Documento sobre el uso apropiado de los Sysadoa orales en el paciente artrósico en el ámbito de la atención primaria.
