¡Médicos al metro!

Alfonso González
La falta de tiempo, la comodidad, la escasez de recursos económicos, el miedo a acudir a los centros de salud… son algunas de las variables que han decidido al gobierno mexicano a instalar una serie de unidades médicas en el metro de México DF. En estas unidades médicas se pueden hacer algunas pruebas básicas gratuitamente como electrocardiograma, análisis de orina o mamografía.

La realidad de México DF es complicada porque es una ciudad con más de 20 millones de habitantes y tiene una longitud que supera los 60 km. En México el Gobierno subvenciona en “Seguro Popular”, un sistema de aseguramiento público y voluntario, mediante el cual se busca ampliar la cobertura de servicios de salud para aquellas personas de bajos recursos que no cuentan con empleo o que trabajan por cuenta propia y que no tienen derecho a lo que entendemos como Seguridad Social en España.

Con la pandemia de la Gripe AH1N1 de 2009 el Gobierno adquirió una importante experiencia, en lugar de pedir a la población que fuera a los centros de salud, fue el sistema de salud el que acudió a los lugares donde estaba el pueblo. En el metro de México DF viajan aproximadamente 4 millones de personas cada día y la distribución de la vacuna en el metro supuso una ampliación de la distribución y cobertura.

Desde febrero de este año se han implantado unas “Unidades de salud de la Red Ángel” en las que se han atendido ya a 41.500 personas, de las cuales 4.500 padecían alguna enfermedad como diabetes o hipertensión. En los próximos meses se va a ampliar a otros 19 tipo de estudios, como el antígeno prostático específico, examen general de orina, cultivo de exudado faríngeo y glucosa en sangre, prueba inmunológica de embarazo, curva de tolerancia a la glucosa, prueba del VIH, ultrasonido obstétrico entre otros.

El ahorro para todos es enorme, un paciente solo paga su título de transporte (0,17€) y se puede ahorrar el precio de un electrocardiograma (24€) o un análisis de orina (1,80€). Para la administración el negocio es completo, por un lado aumenta considerablemente el historial y control médico de los pacientes,  y por otro alivia de manera significativa los centros de salud destinados a otras pruebas más complejas.

Esta es una nueva forma de atender a la población, que supone un acicate para investigar como mejorar la gestión de recursos orientados a atender a la población, perfectamente impulsable en tiempos de crisis.

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