¿Cómo te gustaría ser recordado? David del Portillo

..David del Portillo, director de expansión de Uniteco Profesional.
Siempre que hablamos de seguros, solemos a asociarlo a algún tipo de incidencia que le pueda suceder a un bien preciado, pero yo me pregunto: ¿Qué bien tan preciado puede ser más importante que la vida de uno mismo o la de su familia?

Si formulamos así la pregunta no hay duda, pero esta realidad la vemos los profesionales del sector y no tanto los clientes, que suelen anteponer tener el coche a todo riesgo, un seguro de Hogar con todas las coberturas, en vez de hacer un análisis de sus necesidades patrimoniales o familiares en caso de incapacidad o fallecimiento.

David del Portillo: La aparición de las instituciones financieras en la comercialización de estos productos ha penalizado la verdadera esencia de las pólizas de vida

La aparición de las instituciones financieras en la comercialización de estos productos ha penalizado la verdadera esencia de las pólizas de vida. Hoy, cuando hablas de “Vida”, la gente lo asocia a “imposición bancaria para cubrir una hipoteca”, cuando no es así, o ¿es que la hipoteca es el único gasto que tiene la unidad familiar? Cuando impones en lugar de asesorar, haces que se desvirtúe la visión de las personas hacía lo que, con total seguridad, es el seguro más importante que puedan tener.

El ADN de Uniteco no entiende ofrecer un seguro de vida sin realizar antes un diagnóstico de las necesidades del profesional médico. Cada uno tiene su contexto particular, ¿te imaginas ir al médico y que éste te prescriba un medicamento sin hacerte preguntas o sin haber realizado un diagnóstico previo? De hecho, esa es la percepción que tienen los clientes cuando ofrecemos un producto sin preocuparnos por sus necesidades reales.

Gracias a la confianza de miles de médicos, hemos podido crear nuestros propios productos junto a las mejores aseguradoras del mercado. No solo ofrecemos al sanitario la flexibilidad de adaptar las cantidades aseguradas a sus necesidades reales, si no también, ofrecemos al médico la posibilidad de disponer de coberturas que en el mercado son muy complicadas de encontrar, como la incapacidad permanente total, el doble capital asegurado en caso de invalidez permanente absoluta, la cobertura de enfermedades graves o poder contratar un capital de más de 600.000€ sin reconocimiento médico.

“¿Te imaginas ir al médico y que éste te prescriba un medicamento sin hacerte preguntas o sin haber realizado un diagnóstico previo?”

Hay una concepción errónea de que los seguros de vida sólo se contratan cuando uno tiene familia o hipoteca, pero… esto no es así. Una persona joven puede cubrir cualquier aspecto o hecho que le impida seguir realizando su profesión, en nuestro caso, el ejercicio de la medicina. Sin embargo, los jóvenes siempre nos decían: “cubrir mi profesión es maravilloso, pero ¿para qué quiero tanto capital de fallecimiento si no tengo familia?”, tienen toda la razón. No obstante, gracias a ellos, hemos podido crear un seguro que multiplique por 2, por 3, e incluso por 4, la cobertura de incapacidad profesional permanente.

El perfil del cliente al que asesoramos es una buena muestra de que el seguro de Vida e Incapacidad es esencial. La pensión que recibiría un profesional sanitario de las mutuas de previsión social o de la seguridad social, se aleja mucho de lo que suelen necesitar para tener cubiertos los gastos mensuales que tienen en casa.

La pensión que recibiría un profesional sanitario de las mutuas de previsión social o de la seguridad social, se aleja mucho de lo que suelen necesitar

Para mí, y creo que hablo en nombre de todos, nuestros médicos han sido los auténticos héroes de la pandemia, poniendo en riesgo la salud suya y la de sus familiares por cuidar de todos nosotros. A raíz de esto, muchos nos hemos preguntado:

  •  “¿Cuánto percibo en caso de no poder seguir ejerciendo mi profesión habitual? ¿Es suficiente para asumir mis gastos mensuales manteniendo mi nivel de vida?”
  • “¿Qué cantidad necesitaría mi familia para mantener su nivel de vida en caso de que yo falte?”
  • “¿Cuánto necesitan para asumir los impuestos de mi herencia sin usar sus ahorros o mal vender un bien?”
  • “¿Qué proyección económica tengo y quiero para mi familia en caso de no poder seguir generando ingresos?”

Tener la libertad y la capacidad de decidir… de disponer de un día más para crecer profesional y personalmente, son dos de las cosas más bonitas que puede tener una persona. En este sentido, me hice una pregunta, “¿cómo me gustaría que me recordaran si algún día no estuviere aquí?”, y desde entonces, lo tuve claro:

Reduje mi seguro de coche a terceros y suscribí mi primer seguro de Vida con Incapacidad (tenía 26 años) para que, si me ocurriese algo, mis padres tuvieran un capital para cuidar de mí sin tener que usar el dinero de su jubilación. De hecho, ahora que soy padre y me compré una casa, mi situación ha cambiado y aumenté los capitales ajustándolos a mi contexto personal.

Un seguro de vida es la carta de amor más bonita que puedo dejar a mi familia si algún día no estoy

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