Los pediatras de AP en Madrid denuncian una disminución de 200 profesionales en los últimos tres años

La Asociación Madrileña de Pediatría de Atención Primaria aclara que el nombramiento de 355 plazas anunciado por la Comunidad de Madrid se refiere al concurso-oposición publicado en el BOCM el 14 de febrero de 2019

Pediatras-AP-Madrid

Redacción
En los últimos tres años se ha producido una disminución de 200 pediatras de atención primaria (AP) en la Comunidad de Madrid, según denuncia la Asociación Madrileña de Pediatría de Atención Primaria (AMPap), junto a la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), la Asociación Española de Pediatría (AEP), la Sociedad de Pediatría de Madrid y Castilla la Mancha (Spmycm) y la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y de Atención Primaria (Sepeap).

En concreto, aclaran que el anuncio que realizó el pasado 5 de enero la Comunidad de Madrid sobre el nombramiento de más de 300 pediatras de AP para trabajar en el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) en el turno de tarde se refiere al proceso concurso-oposición de 355 plazas para pediatras publicado en el BOCM el 14 de febrero de 2019. “No se trata de la incorporación de nuevos profesionales, puesto que una gran parte de los opositores que han obtenido una plaza fija ya formaban parte de la plantilla de pediatras de atención primaria del Sermas, pero con contratos temporales (interinos y eventuales)”, explica la Dra. Amanda Fernández, presidenta de la AMPap e insiste en que “la Administración ha tardado cerca de cuatro años en concluir el proceso”.

Dra. Fernández (AMPap): “Una gran parte de los opositores que han obtenido una plaza fija ya formaban parte de la plantilla de pediatras de atención primaria del Sermas, pero con contratos temporales”

Por su parte, la secretaria general de la AMPap, la Dra. María Elena Cabezas, subraya que “en los últimos tres años se ha visto una disminución de unos 200 profesionales en las consultas de Pediatría de AP de la Comunidad de Madrid. Esta pérdida previa es superior y no va a compensarse con la incorporación de profesionales a plazas fijas de pediatras en AP por la oposición”. Esto significa que los pediatras restantes “tendrán que atender a una población mucho mayor en el mismo tiempo, lo que dificultará la obtención de citas y reducirá el tiempo que puedan dedicar a cada acto médico”, lamenta la Dra. Fernández.

Pediatras de AP en excedencia
En relación al concurso-oposición de 2019, la AMPap ha realizado una encuesta en la que han participado el 41% de los opositores. De ella se desprende que el 9,57% de estos pediatras no ha finalizado el proceso administrativo para consolidar una plaza fija como pediatras de AP.

El 42,2% de los pediatras que han obtenido plaza trabajan en hospitales y reconocen que no se van a incorporar a los centros de salud

Además, el 42,2% de los pediatras que han obtenido plaza trabajan en hospitales y reconocen que no se van a incorporar a los centros de salud. Por tanto, “pedirán una excedencia por incompatibilidad de puesto”, explican desde la asociación. Según los datos obtenidos de esta encuesta, solo se incorporarán a la plaza obtenida en AP un total de 13 pediatras y, finalmente, “solo trabajarán unos 26 pediatras nuevos más”, indican.

Los pediatras también denuncian que, de las 355 plazas, solo 19 corresponden a turno de mañana. “El resto son en turno de tarde, sin garantías de flexibilidad horaria y sujeto a modificaciones, según las circunstancias puntuales de cada centro. Esta inestabilidad horaria genera rechazo y desconfianza en los profesionales, hasta tal punto que un 40% de encuestados no se incorporarán a causa del turno”, añaden en la AMPap.

La Dra. Cabezas explica que la demora del proceso selectivo ha provocado “la pérdida de opositores que se han trasladado a otros destinos con mejores condiciones laborales. O incluso se han incorporado a plazas fijas de oposiciones de otras comunidades autónomas que se han resuelto de forma más ágil”. Por último, desde la asociación madrileña piden que se tenga en cuenta la disminución de 200 pediatras en los últimos tres años. “Tampoco hay que olvidar que la sobrecarga de trabajo de los compañeros que se quedan y la falta de flexibilidad en los horarios tiene un impacto negativo en la atención que se proporciona a la población”, concluye la Dra. Fernández.

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