Redacción
La ministra de Sanidad de España, Mónica García, ha reafirmado el compromiso del país en la lucha contra la resistencia antimicrobiana. Durante su intervención en la Reunión de Alto Nivel sobre la Resistencia Antimicrobiana, en el marco de la 79ª Asamblea General de Naciones Unidas, García destacó el Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN) como una herramienta clave para afrontar esta crisis de salud global.
“He venido para expresar el firme apoyo de España a la declaración política de esta Asamblea General de las Naciones Unidas en relación con el problema urgente de la resistencia a los antimicrobianos”, señaló la ministra, reconociendo la gravedad de la situación y subrayando la necesidad de una respuesta coordinada y global.La resistencia antimicrobiana es una de las mayores amenazas para la salud mundial, la seguridad alimentaria y el desarrollo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la resistencia a los antibióticos causaría millones de muertes anuales para 2050 si no se toman medidas efectivas. Este fenómeno ocurre cuando las bacterias, virus, hongos y parásitos desarrollan mecanismos que les permiten resistir los efectos de los medicamentos, reduciendo la capacidad de tratar infecciones comunes, lo que conlleva a una mayor mortalidad, prolongación de enfermedades y elevados costes sanitarios.
España ha conseguido reducir el uso de antimicrobianos un 13%
En su participación en el evento Fostering an Equitable Global Response to Antimicrobial Resistance, organizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), García detalló las acciones de España. “Desde el Ministerio de Sanidad, en colaboración con otros organismos, nos comprometemos a cumplir los objetivos establecidos en esta declaración para proteger la salud pública y preservar la eficacia de los antimicrobianos”, explicó.
El Plan Nacional de Resistencia a los Antibióticos de España se basa en el enfoque One Health, que reconoce la interconexión entre la salud humana, animal y ambiental. Este plan incluye mejoras en la vigilancia, formación de profesionales, campañas de concienciación y colaboración intersectorial. Gracias a la implementación de estas medidas, España ha logrado reducir el uso de antimicrobianos un 13% en salud humana y un 70% en sanidad animal, según informó García.
Además, la ministra subrayó el avance de España con la aprobación de un marco regulatorio innovador en Europa para la acreditación de programas de uso optimizado de antimicrobianos. Este sistema establece estándares de implementación, seguimiento y auditoría, lo que refuerza el compromiso del país con la mejora continua en este ámbito.
Finalmente, García destacó la importancia de la cooperación internacional en la lucha contra la resistencia antimicrobiana y lo comparó con el reto del cambio climático, otra emergencia que requiere una acción global coordinada para proteger la salud pública.
