Redacción
Conocer la eficacia del balón liberador de fármaco (DCB) recubierto con paclitaxel para mantener abiertas las arterias coronarias pequeñas y estrechas, reduciendo la probabilidad de reestenosis, y evaluar la seguridad de un tratamiento antiplaquetario más corto en pacientes con alto riesgo de sangrado son los objetivos que se ha planteado The PARIS Study. La información obtenida permitirá a los especialistas conocer mejor el comportamiento del dispositivo en el día a día, contribuyendo a mejorar los protocolos clínicos y la atención a pacientes con características complejas.
El estudio, promovido por la Fundación Educación en procedimientos de intervencionismo en cardiología (EPIC),cuenta con la participción de HM Hospitales, a través del Hospital Universitario HM Montepríncipe, para participar como centro activo en el estudio. “Desde HM Hospitales, consideramos fundamental participar en estudios internacionales que nos permitan avanzar en terapias que mejoren la vida de nuestros pacientes. La incorporación de HM Montepríncipe al estudio refleja nuestro compromiso con la investigación clínica de vanguardia y con la innovación que combina seguridad y eficacia en el tratamiento cardiovascular”, destaca el Dr. Juan Abarca Cidón, presidente de HM Hospitales.
El balón recubierto con paclitaxel permite abrir las arterias coronarias pequeñas y estrechas para reducir la posibilidad de reestenosis
Además, la novedad del estudio recae en el análisis de cómo funciona el balón paclitaxel en la práctica real y con pacientes cotidianos, fuera del entorno controlado de los ensayos clínicos. Asimismo, este estudio internacional ya se ha iniciado en varios hospitales de España y Portugal.
Reducir el tratamiento antiplaquetario
En este sentido, la Dra. Leyre Unzúe, jefa de Cardiología Intervencionista en el Hospital Universitario HM Montepríncipe, explica que el estudio ofrece “la oportunidad de explorar estrategias de medicación más seguras para pacientes con riesgo elevado de hemorragias, ofreciendo tratamientos más personalizados y adaptados a cada persona”. En este sentido, se está evaluando la posibilidad de reducir la duración de la medicación antiplaquetaria a solo 7 días en este tipo de pacientes, frente a los tratamientos prolongados que se aplican normalmente, buscando un equilibrio entre eficacia y seguridad.
Por último, la entidad apunta que esta combinación de innovación tecnológica y evidencia científica aplicada a la práctica clínica pretende ofrecer soluciones más seguras y personalizadas para quienes más lo necesitan.











