El Ministerio de Hacienda, con Cristóbal Montoro al frente, quiere seguir reduciendo el déficit, aunque no exactamente más recortes, sino con medidas de contención de gastos, que no se traducen en ingresos y sí en las temidas reducciones de prestaciones públicas.
El hecho de que algunas Comunidades Autónomas sigan teniendo problemas importantes para cumplir sus objetivos de déficit y cuadrar sus cuentas supone que algunas hayan hecho propuestas de medidas de recorte drásticas para ajustarlas.
Un documento ha recogido esas propuestas que incluyen 255 medidas muy concretas, y se las ha enviado a todas las comunidades, aunque muchas de ellas las descarta por considerarlas “inasumibles”, pero también cuenta con otras que sí tienen el consenso de una mayoría de autonomías.
Entre las iniciativas hay algunas polémicas y que entran en plena confrontación con las reivindicaciones de una sanidad pública para todos que tanto se ha defendido en la calle, no solo se trata de eliminar a los defensores del pueblo autonómicos y la centralización de compras para conseguir mejores precios, también aparecen los copagos para las recetas, “tasas hosteleras” en los hospitales o una nueva ampliación de la jornada laboral de los funcionarios o eliminar de nuevo una paga extra.
El objetivo de las Comunidades Autónomas es que sea el Gobierno quien las implante y asuma asuma el coste político y ellas el beneficio económico.
Varias organizaciones que llevan luchando muchos meses por la sanidad pública ya han mostrado su preocupación, especialmente por la nueva pérdida de calidad asistencial que puede suponer y por la nueva pérdida de poder adquisitivo de los funcionarios públicos.
..Alfonso González
