Un fármaco contra la malaria redujo en un 31% la mortalidad por ébola en Liberia en 2014, según Médicos sin Fronteras

Un medicamento contra la malaria usado en Liberia durante la fase del apogeo del ébola en el año 2014, fue la causa posible de que las tasas de mortalidad en un grupo de pacientes con esta enfermedad se redujeran en más de un 30%. Y es que así lo asegura Médicos Sin Fronteras (MSF), a través de un estudio realizado por la propia organización y su centro de investigación Epicentre y, que acaba de ser publicado en New England Journal of Medicine.

En concreto, el estudio demostró que los pacientes que con ébola se les administró un medicamento contra la malaria, el artesunato-amodiaquina (ASAQ), tenían hasta un 33% menos de probabilidades de morir que a los que se les prescribió el medicamento, también antimalárico y, estándar de primera línea, el artemetero-lumenfantrina (AL).

El tratamiento con ASAQ que, forma parte del protocolo que MSF tiene para todos los pacientes sospechosos de ébola, se puso en marcha cuando el centro de tratamiento de ébola en Foya (Liberia) se quedó sin AL durante el pico de la epidemia, en agosto de 2014.

Durante un tiempo de dos semanas, MSF suministró ASAQ en lugar de AL, sin llevar a cabo más cambio en la atención clínica. El análisis de los datos excluye otros factores, como la edad y la carga viral, que podrían haber afectado al riesgo de fallecimiento.

MSF explica que en los últimos ensayos de laboratorio realizados sobre algunos compuestos empleados para tratar otras enfermedades virales como la malaria, se ha documentado la acción positiva de la amodiaquina, un compuesto del ASAQ, contra la enfermedad del virus del ébola.

MSF precisó que, si bien hasta ahora no hay estudios clínicos con pruebas concluyentes sobre los tratamientos llevados a cabo por instituciones de investigación, este estudio retrospectivo proporciona una prometedora información para fomentar aún más las pruebas de ASAQ. No obstante, la calma y precaución por parte de los autores del estudio está presente, y es que como señala Iza Ciglenecki, coautor del estudio, “teniendo en cuenta el contexto particular de este estudio, debemos mantener la cautela de sacar conclusiones generales”, sin embargo, afirma que “hasta la fecha, el ASAQ parece ser un camino prometedor hacia un tratamiento efectivo”, pero añade que para ello “se necesitan con urgencia otros estudios preclínicos y clínicos para confirmar el efecto de ASAQ en la reducción de la mortalidad del ébola”.

Desde que las autoridades de Guinea confirmasen el pasado 21 de marzo de 2014 que la misteriosa enfermedad hemorrágica que había causado desde enero en Guinea la muerte de 59 personas era ébola, la peor epidemia de ébola de la historia ha infectado a cerca de 29.000 personas, y ha causado la muerte de 11.315, en su mayoría en África Occidental, siendo Sierra Leona, Guinea y Liberia los países más devastados.
..Redacción

Opinión

Multimedia

Economía

Accede a iSanidad

Síguenos en