La Sanidad tampoco se libra de la presión de la corrupción

Los corruptos exploran todas las actividades que están a su alcance para obtener sus “inadecuados” beneficios. El constructor David Marjaliza también puso en marcha una clínica en Valdemoro y con planes para invertir en otras cinco más. Marjaliza, en el momento de su detención, era el gestor de un centro privado de radiología y resonancia magnética, además del Centro Médico Valdemoro Plaza. Según la información que publicó el pasado mes de febrero VozPopuli tenía planes para invertir en otros centros de Ciempozuelos, Pinto y Humanes.

Ahora el juez tiene que determinar si este “constructor” es el nexo de unión de los alcaldes de las localidades de Valdemoro, Collado Villalba y Torrejón de Velasco imputados en la Operación Púnica.

Para ocultar su presencia directa, Marjaliza dibujó un inteligente entramado de empresas para sus sociedades, Valdemoro como centro neurálgico.

Operación Taula
El presidente de Valencia, Francisco Camps, utilizó el procedimiento de “tramitación de emergencia” para adjudicar a la empresa Engloba un contrato de 731.555,54 euros, teniendo en cuento que el total de la campaña, incluyendo las vacunas fueron 5.960.000 euros. La Consejería aseguró en su momento que “se tiene que actuar de forma inmediata a los efectos de aportar información precisa sobre la gripe A antes de que comience la campaña de vacunación estacional”.

Engloba es una de las empresas que está siendo investigada en el caso Taula por la posibilidad de haber recibido adjudicaciones a cambio de mordidas y por participar en operaciones de blanqueo de dinero público.


El juez reabrió el caso del Hospital de son Espases porque el fiscal acusó a Matas de adjudicar la construcción del hospital por un total de 780 millones a Dragados. Después de los intercambios de sobres, comisiones y sobrecostes, el propio Matas acabó asegurando que fue a necesaria la adjudicación de la construcción a la compañía de Florentino Pérez para evitar “un problema político“.

El exconcejal de Urbanismo de Palma, Javier Rodrigo de Santos, declaró que Jaume Matas exigió al presidente de ACS una comisión de nueve millones de euros a cambio de darle el concurso.

La Fe de Valencia
En algunos concursos públicos se podía dar la situación de que las empresas presentasen ofertas a la baja para imponerse en la adjudicación de los concursos. Posteriormente, durante la ejecución el importe se encarecía, ya fuese por cambios en los proyectos iniciales o los materiales, o bien se recurriese a añadidos y mejoras. En este caso el importe final incluso podía superar el presupuesto contemplado en el concurso público

El caso del Hospital de la Fe de Valencia fue especial, quizá por el largo periodo de construcción por encima de los previsto, casi dos años más de lo previsto, lo que contribuyó a el coste final de los contratistas aumentara hasta un 23% de sobrecoste, 200 millones de euros.
..Alfonso González

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