El Colegio Oficial de Médicos de Toledo ha puesto en marcha un “certificado de calidad” para los médicos de la provincia que, denominado Validación Periódica de la Colegiación (VPC), tendrá como objetivo el hacer constar que el facultativo cumple con los requisitos adecuados de alto nivel para su práctica profesional, cuyo fin es la búsqueda de la excelencia profesional, tanto para mostrarlo a la sociedad como compromiso interno de este colectivo.
Como informa ABC en su edición de Toledo, con este método, la institución colegial evalúa y reconoce tres parámetros, como es la buena praxis profesional, el adecuado estado psicofísico y el desarrollo profesional continuo de los médicos colegiados en la provincia.
Para obtener dicho certificado de VPC que, es de carácter voluntario, se necesita obtener un certificado de buena praxis, que es dispensado por el Colegio según el expediente colegial; un compromiso de salud; un certificado médico oficial de aptitud psicofísica y un certificado de la empresa sobre los seis últimos años de trabajo.
Todos los trámites y gestiones pertinentes para poder obtener el certificado, se encarga el propio Colegio de Médicos de Toledo, previa autorización del solicitante, y salvaguardando los requisitos de confidencialidad requeridos.
Con esta iniciativa, tal y como recoge ABC en su edición de Toledo, se trata de aportar un instrumento válido que, desde la propia profesión, sea útil para que los facultativos puedan demostrar su nivel de capacitación, como muestra de garantía a la sociedad sobre el grado de cualificación del profesional que les presta o les va a prestar sus servicios.
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