El 28,9% de la población cree que los profesionales sanitarios no informan adecuadamente de las ventajas y riesgos de las vacunas antes de su administración, y es que así se desprende del último Barómetro Sanitario 2016 elaborado por el Ministerio de Sanidad y el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
No obstante, un 50% sí cree que se da una buena información a los pacientes o a los padres en el caso de los niños. Este dato, en concreto, se confirma al ver el grado de acuerdo de la población con el uso de las vacunas, ya que el 89,6% considera que son eficaces para prevenir enfermedades, frente al 3,8% que está poco o nada de acuerdo con esa afirmación.
Además, según esta encuesta del CIS, para la que se han realizado casi 7.800 entrevistas a ciudadanos mayores de edad, un 88% reconoce que es importante recibir todas las dosis de las vacunas, un 74%, no creen que sea mejor que los niños pasen la enfermedad de forma natural y un 11,3% que piensan que es mejor que los niños pasen estas enfermedades de forma natural.
Por motivos económicos -4,4%- hay ciudadanos que dejan de tomar medicamentos
En lo que respecta a medicamentos, en los últimos 12 meses, tan solo el 4,4% afirma haber dejado de tomar algún medicamento recetado por un médico de la sanidad pública, siendo, el motivo, que no pudo costeárselo por motivos económicos.
Del mismo modo, tan solo un 16% guarda en casa envases enteros de medicamentos recetados por su médico y, la mayoría de estos envases enteros son medicamentos que recetan por adelantado para que no falten (52,9%), aquí “el más vale prevenir que curar” nunca estaría mejor dicho; envases que han quedado sin usar porque cambiaron el tratamiento (31,6%), y medicamentos que no se han tomado por decisión del paciente (19,5%). Además, en el 73% de los casos se trata de menos de cinco envases, mientras que en el caso de un 17,7% pueden ser hasta 10 envases.
Sí nos referimos al consumo de antibióticos, un 13,8% de la población afirma haber tomado este medicamento en las últimas dos semanas; en el 89,5% se lo recetó el médico, mientras que en un 4,9% lo compró sin receta y un 4,6% decidió tomarse lo que le quedaba en casa.
De los que los han tomado en las últimas semanas, el 92% afirma haber seguido el tratamiento completo, tal y como le indicó el profesional, frente a un 5,5% que reconoce que lo interrumpió antes de tiempo y, por ende, no respetó las indicaciones del facultativo.
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