Los pacientes de 18-30 años tienen una adherencia al tratamiento casi 10 puntos menor que los de 61-70

La necesidad de una buena adherencia a los tratamientos suele identificarse, por lo general, con perfil muy específico de paciente: persona mayor, con una o varias patologías crónicas y seguramente polimedicado. Pero, segmentado por edad, el nivel de adherencia es casi diez puntos porcentuales más bajo en pacientes de entre 18 y 30 años (44,59%) frente a la población de entre 61 y 70 años (53,4%), según el Estudio Nacional de la Adherencia al Tratamiento en Patologías Crónicas del Observatorio de la Adherencia (OAT). Por ello, los expertos reunidos en las VI Jornadas Científicas de Adherencia al Tratamiento, celebradas hoy en la sede de la Real Academia Nacional de Medicina, han hecho un llamamiento para reforzar las labores de educación y prevención en jóvenes y adolescentes.

El nivel de adherencia en pacientes de entre 18 y 30 años es de 44,59% frente a los de entre 61 y 70 años que es de 53,4%

Hablamos de unas edades en las que se empiezan a asimilar conceptos para el resto de la vida, con lo que también hablamos de tomar precauciones para evitar o retrasar, en la medida de lo posible, la aparición futura de enfermedades crónicas”, ha destacado el Dr. José Manuel Ribera, presidente del Comité Científico del OAT y catedrático de Geriatría de la Universidad Complutense de Madrid.

El Estudio Nacional de la Adherencia al Tratamiento en Patologías Crónicas es el primer trabajo de sus características llevada a cabo en España: 6.300 encuestas a pacientes con diez de las enfermedades crónicas más prevalentes y en base a 38 variables

La adherencia a los tratamientos no solo es excesivamente baja entre los 18 y los 30 años. Desde esta edad y hasta los 60 años, los niveles de adherencia llegan al 51%, siempre por debajo de la población a partir de los 61 años. Así lo ha destacado la Dra. Carmen Valdés, vocal del Comité Científico del OAT, durante una ponencia en la que también ha participado el Dr. Przemyslaw Kardas, jefe del Departamento de Medicina Familiar de la Universidad de Lodz (Polonia) y uno de los expertos más relevantes en el campo de la adherencia en la UE.

El profesor Kardas ha trasladado los resultados de tres encuestas: una sobre adherencia realizada a 2.595 pacientes con hipertensión de nueve países; otra sobre adherencia y uso de antibióticos realizada sobre 1.354 pacientes de cinco países; y la visión de 3.196 profesionales sanitarios procedentes de una decena de estados de la UE.

La adherencia a los tratamientos sigue siendo una asignatura pendiente, asegura el Profesor Ribera

El Estudio Nacional de la Adherencia al Tratamiento en Patologías Crónicas es el primer trabajo de sus características llevada a cabo en España: 6.300 encuestas a pacientes con diez de las enfermedades crónicas más prevalentes y en base a 38 variables. Sus resultados indican que uno de cada dos pacientes no es adherente y ponen de manifiesto que el punto de partida, hoy, sigue siendo el mismo de hace años. “La adherencia a los tratamientos sigue siendo una asignatura pendiente, y dentro de ella hay temas más pendientes que otros”, ha apuntado el Dr. Ribera.

Que no encontremos una adherencia ni buena (superior al 80%), ni tan siquiera regular en patologías de la importancia socio-sanitaria investigada nos dice, en primer lugar, que falta información sobre características y beneficios del tratamiento, así como sobre las consecuencias de su abandono: solo esto explica que el 20% de los pacientes lo dejen si les va bien o el 21% si les va mal. También nos da, de forma indirecta, datos sobre la importancia del entorno socio-familiar: es más elevada en los sujetos que viven solos, así como en aquellos que dan menor importancia a los hábitos de vida saludables”, ha añadido la Dra. Pilar de Lucas, vocal del Comité Científico del OAT.

Para solucionar el problema de la adherencia no hay soluciones mágicas, asegura el profesor Ribera

A la luz de esta nueva información, los expertos coinciden en la necesidad de pasar de las palabras a los hechos. “Hasta ahora hemos puesto parches. Está claro que para solucionar el problema de la adherencia no hay soluciones mágicas, pero gracias a los resultados obtenidos por el Estudio Nacional podremos mejorar la calidad de esos parches”, ha comentado el Dr. Ribera. La Dra. De Lucas, por su parte, ha planteado que la lucha contra la baja adherencia debería partir de “una estrategia nacional común, con objetivos y acciones comunes, aunque luego estas últimas puedan y deban adaptarse al medio específico en que tienen que ser llevadas a cabo”.

Discernir este punto ha sido uno de los objetivos de la jornada, que además de exponer proyectos dentro del sector sanitario ha reunido a tres responsables autonómicos para explicar sus actividades y objetivos en adherencia a los tratamientos: José Luis Quintas, del Gobierno vasco; Alberto Talavera, de Canarias; y Jorge Aboal, de Galicia. Además de la visión de la administración, otros aspectos abordados han sido la actitud de los profesionales ante las bajas tasas de adherencia.

Observatorio de la Adherencia al Tratamiento (OAT)
El OAT es una institución cuyo objetivo principal consiste en mejorar la información, el conocimiento, las habilidades, las actitudes y aptitudes sobre Adherencia Terapéutica en los profesionales e instituciones del sector de la salud, administraciones públicas, pacientes y ciudadanos en general. Para ello el OAT realiza proyectos de investigación, publicaciones propias, actividades de formación y difusión social, campañas divulgativas y desarrolla acuerdos de colaboración con diversas instituciones académicas, empresariales, profesionales y administrativas.

Opinión

Multimedia

Economía

Accede a iSanidad

Síguenos en