Se vislumbra un horizonte esperanzador contra el cáncer de páncreas, patología que a día de hoy no dispone de un tratamiento eficaz y, sobre todo, en la que el diagnóstico se hace cuando ésta ya está avanzada en gran parte de los casos. La potencial nueva estrategia terapéutica viene de la mano del Grupo de Oncología Experimental del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO). No obstante, pese a que estamos ante una puerta abierta para el diseño de nuevas estrategias terapéuticas, aún es pronto para proceder a su aplicación en la clínica.
Según un estudio publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Science, se trata de un tumor agresivo, complejo y que precisa ser contemplado desde varios frentes, no solo mediante el “ataque” a las células tumorales.
La investigación ha sido financiada por el Consejo Europeo de Investigación (ERC), el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad, la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), la Obra Social ‘la Caixa’ y la Fundación AXA.
Las células tumorales del cáncer de páncreas están embebidas en el estroma
El cáncer de páncreas tiene una característica, y es que las células tumorales están embebidas en el estroma, que representa el 90% de la masa tumoral y que forma una barrera que dificulta su tratamiento con inhibidores como la quimioterapia y la inmunoterapia.
El trabajo de investigación del CNIO se ha basado en la identificación de una población celular del estroma que favorece el crecimiento tumoral, para descubrir por qué tienen esa capacidad y lograr anularla. Por lo tanto, su estrategia se fundamentó en la eliminación de estas células del estroma que ayudan al tumor a través de la reprogramación genética.
Nos encontramos ante una futura estrategia terapéutica que se podría combinar con otras como la inmunoterapia, la quimioterapia o los inhibidores dirigidos contra vías de señalización específicas de las células tumorales.
