..Dr. Francisco M. Toquero de la Torre.
Han pasado 18 años desde que iniciamos este siglo XXI y en poco se parece a ese día en que felizmente lo recibíamos como nuevo. Si tenemos que buscar un gran protagonista del cambio de nuestras vidas en estos años lo encontramos, sin lugar a dudas, en la tecnología. Independientemente de la crisis económica aguda, la tecnología ha seguido avanzando y el conocimiento se ha convertido en el auténtico motor de cambio de nuestra sociedad, así como la seña de identidad y de la competitividad de los países y las regiones. Ese es el verdadero futuro de cambio que afectara a pacientes y profesionales, para lo que debemos estar preparados
La crisis económica de la segunda década ha sido aprovechada para supuestamente reformar el Sistema Nacional de Salud (SNS) con el objetivo de hacerlo más eficiente, con la implantación de nuevos modelos de gestión, así como sistemas que nos han permitido evaluar las tecnologías en función del binomio efectividad-coste.
La crisis económica de la segunda década ha sido aprovechada para supuestamente reformar el Sistema Nacional de Salud (SNS) con el objetivo de hacerlo más eficiente
Se debe actuar en diferentes frentes para no perder y retroceder como así está pasando en el campo tecnológico y de futuro. Hay que fortalecer los instrumentos de cohesión y equidad dentro del SNS mediante medidas que aseguren la sostenibilidad del mismo. Promover la cualificación profesional mediante programas de formación y de excelencia y no usar las nuevas generaciones como mano de obra barata bajo la excusa de la enseñanza práctica, nuevos modelos retributivos en función de resultados, pero acordes con la responsabilidad, el ejercicio, y el verdadero compromiso con la organización (que ha de ser bilateral) y la accesibilidad y reconocimiento de los trabajos de investigación, facilitados en tiempo y con economía dedicada a I+D, y no reduciendo aportaciones, a proyectos y suprimiendo becas y subvenciones finalistas a trabajos de investigación en salud.
Se han implantado sistemas de control de gastos, se han centralizado actividades de gestión, pero no se han arbitrado mecanismos de coordinación entre los sistemas de salud de las diferentes comunidades autónomas y con el sector privado, y entre estas y el Estado, por lo que al final se duplican gastos y se facilita la inequidad e ineficacia .
Estas medidas han dado lugar al diseño de métricas coste-beneficio para evaluar el conjunto del Sistema Nacional de Salud. Se ha dotado de contenido real a las agencias de evluación, pasando a ser agencias de innovación, pero se ha cometido el error de que no sean verdaderamente independientes del poder político, y no estén profesionalizadas con expertos. Por tanto, yerran como instrumento de evaluación de los procesos, coordinación y generación de doctrina y de compra de tecnología, aplicando los principios de compra pública innovadora como mecanismo al impulso de la generación de tecnología sanitaria, y han establecido criterios economicistas a corto plazo sin tener en cuenta la dimensión integral de los procesos.
Se ha dotado de contenido real a las Agencias de Evaluación, pasando a ser Agencias de Innovación, pero se ha cometido el error de que no sean verdaderamente independientes del poder político, y no estén profesionalizadas con expertos
Además, se han puesto en marcha medidas para que en España se generase tecnología sanitaria con una visión de mercado global, lo que ha dado lugar a un tejido empresarial que ha entendido la innovación como medio de búsqueda de eficiencia y ha trabajado en el desarrollo de productos y servicios que han permitido ahorrar gasto sanitario, pero ha producido un menoscabo de la calidad del servicio. Deberían ser tecnologías a la medida de los diferentes niveles de atención sanitaria y, especialmente, reforzar el papel de primaria en la etapa de diagnóstico y permitir importantes ahorros al sistema. Las empresas del sector deben aplicar la innovación como medio de búsqueda de la eficiencia y la excelencia en la calidad y seguridad del paciente y no el uso de procedimientos, medicamentos y filtros que no doten de autonomía y ejercicio profesional al primer nivel, para el que están sobradamente preparados.
Se debería poner el foco en la prevención y el diagnóstico de patologías futuras con la genética y la biomedicina, para que se establezcan nuevos modelos de atención basados en la prevención, tecnologías sencillas y eficientes para la detección temprana de problemas de salud y educación desde la infancia en pautas de vida saludables y cuidado propio de nuestra salud.
En el modelo sanitario español imperante desde principios de este siglo XXI, los hospitales, personal clínico, compañías farmacéuticas y empresas de tecnología sanitaria operan de forma prácticamente aislada. La provisión sanitaria sigue muy segmentada y, como resultado, la asistencia sanitaria al paciente (consumidor final) es lenta y costosa y el sistema sanitario en su conjunto, inefectivo e ineficiente. Para más complicación continúa existiendo una enorme variabilidad en el uso de la información y en el método de atención a los pacientes de un lugar a otro, que provocaba inequidad en el sistema.
Necesitamos un nuevo modelo relacionado con el tratamiento de los enfermos crónicos, a través del reforzamiento de la atención domiciliaria y de sistemas de monitorización selectiva, como parte de los nuevos procesos de seguimiento del enfermo. La incorporación de las TIC al sistema sanitario y la salud digital o e-salud en continuo avance. Se ha producido un incremento de la externalización de los servicios en la sanidad pública. Se demoniza la sanidad privada en vez de usarla como complemento de una sanidad pública y universal de calidad.
Necesitamos un nuevo modelo relacionado con el tratamiento de los enfermos crónicos, a través del reforzamiento de la atención domiciliaria y de sistemas de monitorización selectiva
En cuanto al profesional de la medicina, los recortes, las incompatibilidades, las exclusividades (falso eso de a igual trabajo, igual remuneración) y retribuciones de risa para profesionales altamente cualificados en preparación responsabilidad y dedicación al paciente hacen que su futuro pase por la marcha a otros países de nuestro entorno donde son mejor considerados. Comienza a aparecer la figura del profesional sanitario freelance que, a través de los medios que le proporcionan las TIC, es capaz de ofrecer sus servicios directamente al paciente o a otros profesionales del sector, con una función encaminada a aportar una segunda opinión.
Asimismo, hace ya unos años que han aparecido redes de cooperación sanitaria a nivel internacional, formadas por grupos de profesionales especializados, que funcionan como plataformas para el intercambio de conocimientos, resultados de investigaciones, formación continua de los profesionales en una especialidad concreta, etc.
En el área de servicios, la implantación de la sanidad electrónica está suponiendo la existencia de centros sanitarios virtuales de atención al ciudadano, desde donde, de manera remota, se analizan, administran y distribuyen los servicios y las prestaciones demandadas por el paciente. En pacientes dependientes o crónicos, la telemedicina va a permitir el uso de etiquetas de identificación por radiofrecuencia (RFID), una tecnología que, además, facilita la localización del paciente en tiempo real.
La implantación de la sanidad electrónica está suponiendo la existencia de centros sanitarios virtuales de atención al ciudadano
Pero será necesario trabajar mucho en nuevos procesos y modelos de negocio para ser capaces de prestar este servicio de la forma más eficiente y competitiva en términos de mercado. Hoy existen biosensores que, implantados en el enfermo de forma no invasiva, son capaces de detectar, analizar y transmitir datos sobre su estado de salud en tiempo real. En el caso de pacientes de riesgo, estos dispositivos están embebidos en prendas de vestir.
Yo personalmente he asistido a una demostración de drones sanitarios a modo de 061, que llegan al lugar del enfermo crítico y despliegan desfibrilador, monitorización cardiaca de tensión y ritmo y de situación y procedimiento de estabilización del paciente
Una visión de futuro para el sector de la salud de forma automática y equipos sanitarios móviles en situaciones críticas significarán también una pequeña revolución en relación con los puntos de asistencia sanitarios, sin olvidar que cada día iremos hablando más de sector sociosanitario en vez de sanitario en exclusiva.
El profesional está preparado para estos cambios. ¿Lo está la administración y la política con esa gestión falsaria de lo público? Es cuestión de prioridades. Si volvemos a apostar por la educación y por la sanidad como bienes y derechos de una sociedad civil que quiere progresar a un desarrollo de futuro y de bienestar, debemos tener en cuenta que los cambios arriba mencionados han de ser drásticos y muy a corto plazo.