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Se calcula que un 30-40% de pacientes con cáncer presenta dolor en el momento del diagnóstico, llegando hasta el 70-80% en el caso de los pacientes con enfermedad avanzada.
Cuando la intensidad es cada vez mayor en el dolor, de rápida aparición y corta duración, se convierte en Dolor Irruptivo Oncológico (DIO), y en el paciente tiene un impacto muy negativo, ya que altera su calidad de vida desde muchos ámbitos, como afectar en su estado de ánimo -ansiedad o depresión-, originar trastornos psicológicos, e influir en la calidad del sueño.
Conocer el grado de adherencia a los tratamientos que ayudan a paliar el dolor en pacientes oncológicos, objetivo del estudio Onco-Adhiérete
Por ello la Fundación ECO (Excelencia y Calidad de la Oncología), ha presentado en el marco del Congreso de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) -celebrado recientemente en Madrid-, las conclusiones de su estudio Onco-Adhiérete, con el que ha querido tomar el pulso de los oncólogos que tratan a estos pacientes para conocer el grado de adherencia a los tratamientos que ayudan a paliar, en la medida de lo posible este dolor, y establecer de esta forma pautas para mejorarla.
Según los expertos, uno de cada cuatro pacientes oncológicos no cumple con los tratamientos para paliar el Dolor Irruptivo Oncológico. Pormenorizadamente, más de la mitad de los oncólogos que han sido encuestados indican que entre el 25% y el 50% de sus pacientes no siguen las instrucciones de prescripción ni tampoco los tiempos de administración que les son recomendados para estos fármacos. En opinión de los oncólogos esta grave falta de adherencia provoca una pérdida de calidad de vida como principal consecuencia (87,5% de los casos), el deterioro de las relaciones familiares y sociales y un mal pronóstico como consecuencias secundarias.
Como explica el Dr. Rafael López, secretario de la Fundación ECO y jefe del servicio de Oncología del Complejo Hospitalario de Santiago de Compostela, “los principales factores no farmacológicos que obstaculizan la adherencia terapéutica en los pacientes son el sentimiento autopercibido de que no necesitan tratamiento, la falta de apoyo familiar, así como la ausencia de conciencia de que se trata de una enfermedad”.
Dr. Rafael López, secretario de la Fundación ECO: “Los oncólogos debemos mejorar la adherencia al tratamiento del DIO desarrollando estrategias dirigidas a la educación al paciente y sus familiares sobre el manejo del dolor”
Por otro lado, la ineficacia percibida del tratamiento (37,5% de los casos), la preocupación por los posibles efectos adversos (32,3% de los casos) y las pautas terapéuticas complicadas (15,6% de los casos), se encuentran como principales factores farmacológicos.
A tenor de estos resultados, como concluye el Dr. López, “los oncólogos debemos mejorar la adherencia al tratamiento del DIO desarrollando estrategias dirigidas a la educación al paciente y sus familiares sobre el manejo del dolor, mejorando las pautas de administración y los efectos adversos y la comunicación entre médicos y pacientes”.
