..Antonio Burgueño Jerez. Director del Proyecto Impulso
Para tener resultados positivos en la gestión de riesgos hay que tener en cuenta una serie de aspectos clave. Una de ellas es la cultura de la seguridad del paciente en la organización. Sin ella no habrá implicación de los profesionales y las cosas no funcionarán. Cualquier protocolo, iniciativa, procedimiento, etc, estas destinado a “dormir en el sueño de los justos”.
Para tener resultados positivos en la gestión de riesgos hay que tener cultura de la seguridad del paciente en la organización
Otra fundamental es el liderazgo, mucho se ha escrito sobre ello. No es mi intención intentar explicar qué es y qué nos es, si se nace o se hace el lider. Tampoco quiero hablar de los diferentes tipos de liderazgo. Sin la presencia e involucración de la dirección es imposible darle a la seguridad del paciente la relevancia correcta. Y mi cho menos la continuidad que la misma requiere. Ese liderazgo no es unipersonal, más bien de todos los directivos y responsables implicados en el asunto. Y lograrlo supone dos cosas:
1. Ser líder, una actitud necesaria para “tirar del carro” uno mismo, y que debe contagiarse a los demás. No necesariamente ha de ser un profesional como en el que los tópicos describen. Suele “caer mejor” el líder humilde que con su esfuerzo diario y continuo logra que más profesionales se “suban al carro”. Es lo que Robert K. Greenleaf denomina “líder servidor”. Su propio nombre deja entrever hacia donde apunta la idea.
2. Actuar como líder. Tengo mis dudas de que la palabra líder en este caso sea el más correcto. En cualquier caso, se trata de que ha de estar el responsable adecuado en la puesta en marcha y seguimiento de los planes e iniciativas, en un papel participativo muy determinado. Debe buscar el difícil equilibrio entre “ni pasarse ni quedarse corto”.
Sin la presencia e involucración de la dirección es imposible darle a la seguridad del paciente la relevancia adecuada
Es indispiensable contar con la figura de los responsables de seguridad del paciente para que la gestión tenga éxito. Tiene que estar en cada uno de los servicios, áreas o procesos asistenciales de lamorganización. Tintes teóricos, pero es indispensable en la práctica.
Esta figura es clave para impulsar iniciativas y gestionarlas. Su misión es repartir tareas, involucrando a otros profesionales, participar en la planificación gestión de la seguridad del paciente, etc. En definitiva, dar vida y viabilidad a que se trabaje en una medicina más segura cada día en cada organización. Un liderazgo silencioso muchas veces, pero imprescindible siempre. Líderes servidores en palabras de Greenleaf.
