..Gema Maldonado.
Más de cuatro décadas dedicadas a la oftalmología y su innovación. Docente, investigador y médico en ejercicio, el profesor Luis Fernández-Vega Sanz ha recibido el Premio a la Innovación Tecnológica Sanitaria 2019 de La Fundación Tecnología y Salud y Fenin. En iSanidad hablamos con el doctor sobre su trayectoria y el papel de la innovación tecnológica en el avance de la oftalmología.
¿Por qué ha apostado por la innovación permanente en el ejercicio de su profesión?
Sin duda, por sus múltiples ventajas. La innovación, bien aplicada y contrastada, aporta fiabilidad, rapidez y confort a nuestros pacientes. Además supone, junto a la tecnología, el mejor soporte sobre el que un profesional de la salud debe basar sus decisiones.
En estos más de 40 años de trayectoria como oftalmólogo, ¿qué innovación o innovaciones tecnológicas han marcado un antes y un después en el campo de la oftalmología y en su ejercicio?
No sé si me atrevería a decir tanto, pero sí que me parece muy importante señalar aquí los avances que se han dado en cirugía para tratar los defectos de refracción -miopía, hipermetropía y astigmatismo-, el uso de las lentes intraoculares multifocales -tanto para la cirugía de la catarata como de la presbicia- y las de foco extendido, así como los injertos de córnea, el manejo del glaucoma, los nuevos aparatos de angio-OCT (instrumentos que posibilitan ver la retina periférica) y los vitreotomos, que hacen que la cirugía sea más segura. Y también destacaría las novedades en el tratamiento de las degeneraciones maculares con antiangiogénicos, sólo por ponerle algunos ejemplos.
Gracias a la investigación hemos vivido avances importantísimos en las últimas décadas. Es es el único camino para seguir cosechando logros en el futuro
Ha tenido la oportunidad de atender a miles de pacientes. A muchos les ha podido ayudar y, para otros, supongo, la oftalmología aún no tiene solución a su problema de visión. ¿Cómo se gestiona la frustración como profesional en esas situaciones?
Es algo que llevamos aparejado a nuestra profesión y con lo que tenemos que convivir, lo que no quiere decir, ni mucho menos, resignarnos. Gracias a la investigación, tanto clínica como básica, hemos vivido avances importantísimos en las últimas décadas y estoy seguro de que ese es el único camino para seguir cosechando logros en el futuro.
¿Permitirá la tecnología eliminar a medio plazo aquellos tipos de ceguera y discapacidad visual grave que a día de hoy no tienen cura?
La frontera hoy se encuentra en el nervio óptico. Suelo decir que el ojo es una bombilla conectada a la corriente a través, precisamente, del nervio, que ejerce de cable. Si este se encuentra roto o dañado, poco o nada podemos hacer.
¿Podemos estar satisfechos con la innovación tecnológica en oftalmología de nuestro sistema sanitario?
Sí, sin lugar a duda. Desde nuestra clínica estamos en contacto continuo con centros de referencia de todo el mundo -como el Moorfields Eye Hospital de Londres o el Bascom Palmer, de Miami, donde profesionales del Instituto han realizado diferentes estancias- y podemos afirmar que nuestro sistema sanitario está a la par con ellos. En esa línea, también creo que es esencial el impulso que realizamos desde entidades privadas como la nuestra, desde la que en 2009 creamos la Fundación de Investigación Oftalmológica, un laboratorio puntero en nuestro campo del que existen pocos ejemplos en Europa.
En 2009 creamos la Fundación de Investigación Oftalmológica, un laboratorio puntero en nuestro campo del que existen pocos ejemplos en Europa
Teniendo en cuenta la importancia que tiene la vista para el ser humano, ¿cuidamos suficientemente nuestros ojos los españoles?
Creo que hemos avanzado mucho en ese sentido en los últimos años. Hay una consciencia cada vez mayor por parte del paciente de la importancia de mantener unos hábitos de vida saludables -como pueden ser una correcta alimentación, no fumar o realizar deporte de forma regular- que redundan en nuestra salud ocular. No obstante, no debemos olvidar añadir a esos buenos hábitos la necesidad de realizar revisiones periódicas de la vista –en especial a partir de los 40 años– para detectar enfermedades que no producen síntomas hasta fases muy avanzadas. Un diagnóstico a tiempo es clave para mejorar el pronóstico de muchas patologías.
Es necesario realizar revisiones periódicas de la vista, es especial a partir de los 40 años. Un diagnóstico a tiempo es clave para mejorar el pronóstico de muchas patologías
¿Qué ha supuesto para usted la concesión de este premio por su afán innovador?
Todo premio es motivo de orgullo para quien lo recoge. Este, además, representa un aval de que avanzamos por el mejor camino posible, el de la tecnología sanitaria, que juega un papel esencial en la atención que reciben los más de cien mil pacientes que atendemos en el Instituto cada año. Nuestra firme apuesta por la investigación y la formación permanente para mantenernos a la vanguardia en salud ocular recibe así un nuevo respaldo, que nos alienta a seguir en la misma dirección.
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